Los Miami Heat se quedaron con el derbi de Florida ante los Orlando Magic, imponiéndose este martes por 121-95 en una noche caracterizada por la irregularidad de ambos conjuntos, cerrada por Jimmy Butler en los últimos minutos. Butler fue fundamental para entender el triunfo de Miami Heat con 23 puntos, de los cuales 10 llegaron en el último cuarto cuando llegó a acercarse Orlando por última vez. Es la sexta ocasión consecutiva en la que supera la veintena de puntos.
Además, fue una noche coral para los locales con hasta siete jugadores en dobles dígitos de anotación. Los 18 puntos de un Terry Rozier más adaptado, y los 14 de Bam Adebayo y Tyler Herro, ayudaron a alcanzar la victoria número 27 que iguala a ambos equipos en la tabla del Este.
Todos los jugadores estuvieron disponibles para Erik Spoelstra por primera vez en mucho tiempo, pero hubo una clara intención de repartir minutos y no sobrecargarles pensando en el partido ante los San Antonio Spurs de este mismo miércoles.
Paolo Banchero mantiene a Orlando
En Orlando hubo un único nombre sobre todos los demás, Paolo Banchero, que firmó 23 puntos y dio la cara durante todo el choque ante la falta de inspiración de sus compañeros. El argumento para los Magic era Paolo Banchero y poco más. En el tercer periodo le arropó Wendell Carter Jr con 10 puntos, insuficiente para competirle a unos Heat en los que cualquiera podía anotar.
El último órdago al partido por parte de Orlando coincidió con otra de las bajadas de esa montaña rusa en la que se convierte cada partido de los Heat, se situaron a 14 puntos (98-84) en apenas tres minutos de juego.
Con 23 tantos de distancia, ambos técnicos decidieron dar por cerrada la noche y sentaron a sus hombres importantes. Los llamados ‘minutos de la basura’ dejaron un marcador definitivo de 121-95, que cierra la serie de cuatro enfrentamientos en liga regular a favor de los locales por 3-1.
El Pepazo/Marca/EFE