El futbolista muestra su ‘resucitador’: «Un cable al corazón». Tom Lockyer, futbolista del Luton Town, muetra el DCI (desfibrilador cardioversor implantable) que le han implantado en el torso después de sufrir dos colapsos en siete meses

ENRIQUE CORBELLA

Tom Lockyer, futbolista del Luton Town que ha sufrido dos colapsos en siete meses, muestra dónde está implantado el DCI (desfibrilador cardioversor implantable) en su torso, y explica cómo el dispositivo podría salvarle la vida después de sufrir un paro cardíaco en diciembre que lo dejó técnicamente muerto durante dos minutos y 40 segundos.

Se me paró el corazón durante 2 minutos y 40 segundos. Sé que literalmente morí
Tom Lockyer

«Esta es mi herida de batalla… Mi desfibrilador está ahí, como pueden ver, hay un cable que atraviesa y llega hasta el corazón en caso de que alguna vez necesite activarse», dijo Lockyer mostrando a Sky Sports las cicatrices en su torso y la ubicación del desfibrilador (el dispositivo sobresale bajo su axila izquierda, con una cicatriz que marca la incisión realizada para colocarlo).

Lockyer : «El desfibrilador monitorea mi ritmo cardíaco»

El objetivo del desfibrilador es hacer que su corazón vuelva a funcionar en caso de que se detenga nuevamente, eliminando la necesidad de esperar a que llegue un desfibrilador al lugar y, con suerte, salvarle la vida.

Video thumbnail — Susto en la Premier: Lockyer se desvanece sobre el campo

«Monitorea constantemente mi ritmo cardíaco y si se sale de ciertos parámetros está diseñado para darme una descarga… Ese es el cable: la batería dura unos 10 años, por lo que sólo es necesario cambiarla cada 10 años y espero no necesitarla nunca, pero está ahí como medida de precaución», explica el futbolista.

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El Pepazo/Marca