JESÚS SÁNCHEZ
La temporada de la consagración absoluta de Luka Doncic, que podría ser una percepción particular a la luz de sus actuaciones, tiene una confirmación empírica: fabrica 59 puntos por partido lo que convierte su campaña en la más productiva de la historia, superando las de algunos mitos de la NBA como Michael Jordan u Óscar Robertson.
Los Mavericks, que viven la mejor racha de resultados del curso (siete victorias consecutivas), están disfrutando de la mejor versión del esloveno, que regresó del circo del All Star Game de la mejor manera: 41 puntos a los Suns.
Doncic es segundo en anotación, 34,3 puntos por partido, y tercero en asistencias (9,6) lo que le lleva no sólo a postularse como un claro candidato al MVP sino a comandar una estadísticas asombrosa: su equipo tiene garantizados casi 60 puntos. Es lo que pasa por sus manos en cada partido. Increíble.
LeBron James, que después de jugar contra Wembanyama calificó al francés de «jugador especial», hizo campaña a favor del MVP de Doncic. «Su talla, su peso, es un base muy grande, su visión del baloncesto, su capacidad para controlar el juego sin hacer un tiro. Puede pasar de cualquier manera. Puede ser MVP», dijo la súper estrella de la NBA en una entrevista.
Precisamente Luka entró en un selecto grupo al que sólo pertenecía LeBron. Ante los Suns se convirtió en el segundo menor de 25 años que ha pasado de 10.000 puntos, 3.000 rebotes y 3.000 asistencias.
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El Pepazo/Marca
