Los Phoenix Suns cumplen en San Antonio (42-29) en una noche mala del prodigio francés
También debe acostumbrarse a eso. Victor Wembanyama ilusionó (31+16) ante los Memphis Grizzlies pese a sus bajos porcentajes de acierto y no más de 24 horas después recibió la otra cara de la moneda. El poco volumen, pese a subir la efectividad, le llevó a un partido gris, de 13 puntos (5/7 TC), 5 rebotes y 4 asistencias. Los Phoenix Suns, de Devin Booker y Kevin Durant, camparon a sus anchas mientras los San Antonio Spurs hacían aguas por todos lados (106-131).
Booker destacó con 32 puntos (14/24 TC y 3/7 T3), 7 rebotes y 9 asistencias, y Durant acompañó con 25(12/16 TC)+4+5. Además Bradley Beal aportó un doble doble (13+12). Es el potencial de Phoenix, que aunque muchas semanas está escondido está en la pelea por asegurar la post-temporada de forma directa (un triunfo sobre los Sacramento Kings, los primeros del Play-In). Allí las cosas serán distintas.
Porque si sus estrellas están bien, todo cambia. Lo expresó Gregg Popovich, técnico de los Spurs. «Jugamos con más contacto y físico en la segunda parte, pero no vas a frenar a Booker y Durant de hacer lo que hacen y se suma que Beal está sano ahora», contó. «Son un trío muy duro. Nuestros chicos intentaron de todo, pero debemos seguir», abrochó.
Phoenix encadena tres triunfos. Conectan al banquillo (47 puntos en San Antonio) y el faro en ataque está dividido entre un monstruo de tres cabezas con potencial para hacer mucho daño al resto. «Es para lo que hemos trabajado toda la temporada. El timming es adecuado, porque estamos en la parte importante del curso y llegaremos concentrados para los Playoffs», reconoció Booker.
San Antonio, por su parte, sigue entre lo que da Wembanyama y las derrotas. «Víctor tiene un aire de veterano experto. Podemos jugar todas las veces que sean que siempre hará algo que antes no habremos visto», llegó a confesar Booker. Tras la paliza, el elogio. De unos Suns al alza.
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El Pepazo/Marca