Michael Jordan es considerado por muchos como el jugador de baloncesto más competitivo de la historia. Esa opinión es prácticamente unánime entre sus excompañeros, los entrenadores que le dirigieron y los rivales que sufrieron su tiranía en la cancha. Uno de los que más batallas tuvo con él a lo largo de los años fue Dominique Wilkins, y no sólo en los ‘All Star’, donde rivalizaban en los concursos de mates desafiando a la gravedad para ver quien era el mejor del mundo. Se enfrentaron en 1985, con victoria para Wilkins, y en 1988 ganó Jordan con un mate desde la línea de tiros libres que se convirtió en icónico.

El exjugador de Atlanta Hawks (1982-1994), Los Angeles Clippers (1994), Boston Celtics (1994-1995) y San Antonio Spurs (1996-1997) habló recientemente en el podcast ‘All The Smoke’ sobre esa rivalidad histórica que mantuvo durante muchas temporadas con el considerado mejor jugador de todos los tiempos y resaltó de él la extraordinaria intensidad que ponía en la cancha en todo lo que hacía.

En mi época jugué contra algunos de los jugadores más duros y talentosos que jamás hayan jugado este deporte. Pero Jordan estaba fuera de categoría, era un fenómeno y tenía una actitud que lo acompañaba

Dominique Wilkins (Exjugador de la NBA)

“En mi época jugué contra algunos de los jugadores más duros y talentosos que jamás hayan jugado este deporte. Pero Jordan estaba fuera de categoría, era un fenómeno y tenía una actitud que lo acompañaba. Cuando jugaba contra Mike, sus ojos estaban inyectados en sangre en todos los partidos, era como si estuviera poseído. Yo solía decirme a mí mismo: ‘Tengo que ir a trabajar esta noche. Jesús viene’”, relató Wilkins.

Brutales anotaciones en sus duelos

Wilkins salió escaldado muchas veces en sus enfrentamientos con Jordan, pero siempre dio la cara y estuvo a la altura ante el mejor jugador de la historia, algo que no muchos pueden decir. No en vano, a lo largo de su carrera promedió 29,8 puntos por partido ante la estrella de los Bulls en sus 45 duelos directos, partidos en los que Jordan acreditó 31,8 puntos de media. Cada vez que se medían los festivales anotadores estaban garantizados.

Uno de sus encuentros más memorables se produjo en diciembre de 1986, cuando Wilkins anotó 57 puntos contra los Bulls, lo que supuso el partido con mayor puntuación que un rival había logrado en el mejor momento de Jordan , que se lo tomó casi como una afrenta personal y respondió anotando 61 puntos en la revancha, pero los Hawks ganaron. ‘Air’ siempre llevaba la cuenta de los puntos y le atraía imponerse en ese tipo de desafíos

Jugué contra muchos grandes jugadores, pero jugar contra Michael fue lo máximo. Era un asesino que quería ganar a cualquier precio

Dominique Wilkins (Exjugador de la NBA)

Wilkins recuerda con nostalgia esos partidos ante Jordan: «Mike y yo somos buenos amigos. Siempre nos respetamos. Vivíamos para competir entre nosotros. Jugué contra muchos grandes jugadores, pero jugar contra Michael fue lo máximo. Él va a hacer lo suyo, y si no puedes hacer lo tuyo, habrás perdido», asegura antes de destacar el instinto letal del de los Bulls: «Mike era un asesino que quería ganar a cualquier precio. Quería tomar tu corazón, pero yo tenía la misma mentalidad. Quería tomar mi corazón y yo tenía que protegerlo”.