José Cedeño
Observamos el panorama nacional e internacional y vemos una tendencia a la autoproclamaciones como una especie de moda, así que el pasado 29 de enero 2019 se autoproclama Presidente de la República Bolivariana de Venezuela Juan Guaidó, y como para echarla gasolina al fuego en cuestión de segundos Donald Trump he insto por no decir chantajeo otros grupos de países a que se sumen a esta acción, eso llevo a nuestro país a una serie de sanciones y congelamiento de sus cuentas en el exterior, donde evidentemente se dilapido nuestros activos en el exterior.
Pero esto está como para agarrar palco el Senado de España reconoce a Edmundo González como presidente electo de Venezuela, el espíritu de Fernando VII como todavía anda por eso lares, lo que no saben los españoles que aquí camina la Espada de Bolívar por América Latina a esta patota de malandros con corbata se una también la Unión Europea y el Edmundo haciendo el motolito, como que no rompe un plato se une a la moda de las autoproclamaciones.
La digna Asamblea Nacional de nuestro país pide de inmediato la ruptura de relaciones diplomáticas con el Reino de España, el cuento que no le han leído al pueblo español es que el 70 por ciento del petróleo que consume es venezolano a precio preferencial y la situación económica de España es de pronósticos reservado que piensan ustedes cuando la crisis energética comience a tocarles el bolsillo. Por lo visto como que al final las autoproclamaciones no traen nada bueno y como dice la canción: El que siembra su maíz que se coma su frijol.
Y bajando un poco más de estatus y dejando las lides de la nobleza, tengamos contacto con la plebe que en ocasiones aspira estar a la moda, toquemos un punto de hacer un llamado a la sindéresis para que el Consejo Estadal de la Comunicación tome el rumbo original, siendo un órgano colegiado se viene manejando bajo directrices personales dejando a un lado el consenso que una vez llego a tener, donde las decisiones las tomaba la mayoría y todos podían expresar su opinión sin represarías de ningún tipo, nuestro colectivo no se siente representado donde una sola persona toma las decisiones sin tomar en cuenta a los demás.
Se escoge las comisiones y en la siguiente reunión se disuelven, tomando la decisión unilateral de expulsar o incluir a alguien de acuerdo a su criterio no se puede manejar un colectivo con un espíritu excluyente, revanchista y elitista. No siendo el Consejo un buen escenario para cumplir las ambiciones personales sino para trabajar en pro de un colectivo nos guste o no, tomamos nuestro tiempo para que se diera una rectificación y volver al proyecto original como no se vislumbra en un futuro cercano un cambio de actitud decido dar mi opinión muy personal, en ese colectivo comunicacional no existe la figura jurídica de coordinador (a) solo se es vocero (a) y recoge la palabra del colectivo para hacerla valer, la organización es horizontal y no vertical.
Hacemos un llamado a los organismos que les competen: MIPCI, CONATEL y la Comisión de Medios de la Asamblea Nacional, ser mediadores para que predomine la legalidad y el consenso.
“Una revolución solo puede ser hija de la cultura y de las ideas.”
Fidel Castro Rus durante la toma de posesión del presidente Hugo Chávez Frías en Caracas, el 3 de febrero de 1999.
El Pepazo