Se conversó y se asumieron compromisos, por lo que el conjunto rapaz garantiza jugar los dos encuentros que les falta del calendario Round Robin donde luchan a brazo partido para lograr ambas victorias y, dependiendo de una derrota de Bravos de Margarita, forzar un empate y la posibilidad de un juego extra por el cupo a la final contra el ya clasificado Cardenales de Lara.
Hebert Colina M.
La tensión bajó, se conversó y se llegó a un acuerdo por lo que los peloteros de las Águilas del Zulia sí saltarán al terreno de juego contra Navegantes del Magallanes.
La cita sería a las 8:00 de la noche en el estadio Luis Aparicio dónde estaba pautado para las 6:00, momento cuando explotó la situación.
Pero motivado a una protesta de los jugadores que no se uniformaron, en reclamo a pagos, tomaron la decisión de no jugar.
Actuó la gerencia de inmediato, conversaron y mediaron, todo ello para bajar la presión y finalmente acordaron el compromiso de pagar, entre otras cosas, la deuda contraída.
De tal manera, pues que los aguiluchos sí garantizan jugar los dos encuentros que les falta del calendario Round Robin donde luchan a brazo partido para lograr ambas victorias y, dependiendo de una derrota de Bravos de Margarita, forzar un empate y la posibilidad de un juego extra por el cupo a la final contra el ya clasificado Cardenales de Lara.
Como se conoció, la situación irregular se llevó toda la atención de los fanáticos de la LVBP durante este miércoles cuando los peloteros de las Águilas del Zulia se negaron a saltar al terreno de juego del Estadio Luis Aparicio para enfrentar a los Navegantes del Magallanes.
Tanto el lanzador abridor Jorge Tavarez como el resto de sus compañeros no se uniformaron a falta de pocos minutos para el comienzo del juego, ya que esperaban que la directiva resolviera dicho inconveniente.
El motivo se debió, al parecer, a que presuntamente no les habían cancelado en totalidad las deudas correspondientes.
El Pepazo/Con información de Meridiano