Desde que Willson Contreras firmó en diciembre del año 2022 un pacto por cinco años y US$87.5 millones con Cardenales de San Luis, club que lo veía como el receptor sustituto del casi eterno y hoy retirado Yadier Molina, los problemas surgieron casi desde el primer mes en 2023.

Esa vez los pitchers, sobre todo los abridores, cuestionaron su selección de envíos en determinados momentos de un partido. Fue relegado por poco más de una semana a ser bateador designado, pero al final volvió al puesto por el que lo firmaron.

En invierno de ese año y durante los entrenamientos primaverales en 2024, Willson empezó a profundizar en el encuadre para recibir lanzamientos y soltar la bola más rápido a las bases.

Fracturas en el antebrazo izquierdo y el dedo medio derecho, lo alejaron por casi ochenta partidos y cuando regresó, fue relegado a la inicial y como designado.

El panameño Iván Herrera y su compatriota venezolano Pedro Pagés ocuparon la posición dos por el resto de la campaña. Y San Luis, que está apostando a la renovación, se la estarán jugando con estos dos jóvenes.

Herrera bateó .301/.372/.428 en 72 careos, con OPS de .800. Pagés ligó para .238/.281/.376 en 68 juegos, pero conectó siete vuelacercas y fue elogiado por su defensa y manejo de los lanzadores, algo que fue la clave en la permanencia de Molina (potencial Salón de la Fama) por 19 años en la receptoría de los “pajaros rojos”.

Willson Contreras, a quien le restan tres años de su contrato, sabe que esta decisión de renovación por parte de la gerencia y personal técnico de San Luis, no tiene marcha atrás. Claro está, en caso de emergencia apelarían a Contreras, quien en mayo cumplirá 33 años
El equipo estaría dispuesto a cambiarlo, pero Contreras no está dispuesto por ahora a autorizarlo por una cláusula de no canje.

Por supuesto que el oriundo de Puerto Cabello, estado Carabobo, debe haber analizado que en San Luis será donde tenga más chance de jugar a diario, mientras que en otros clubes lo más seguro es que sea relegado a jugar sólo contra pitchers zurdos. También San Luis sabe que todavía su bate es letal, ya que en apenas 84 careos el año pasado, compiló un OPS de .848, average de .262 con quince jonrones y 17 dobles.

Y ahora que Willson sabe que dividirá su tiempo entre ser designado e inicialista, ha trabajado fuerte con los entrenadores del club durante esta temporada baja. No juega en la inicial desde 2019, cuando militaba con Cachorros de Chicago y apenas suma once careos en la posición en 9 años de carrera. Será su otro gran reto para mantener sus “status”.