El balance preliminar hace de esta tragedia la segunda más grave de la historia del fútbol, tras la estampida del Estadio Nacional del Perú que dejó 328 muertos en 1964.
El partido de la primera liga de Indonesia que este sábado enfrentó al club del fútbol Arema FC con el Persebaya Surabaya, que venció por 2 a 3, desembocó en fuertes disturbios que dejaron más de un centenar de víctimas mortales y un número similar de heridos. Los hechos ocurrieron en el estadio de Kanjuruhan, en la regencia de Malang (provincia de Java Oriental), informa la cadena local tvOne.
Por su parte, el vicegobernador de Java Oriental, Emil Dardak, afirmó en entrevista con Kompas TV que la tragedia dejó 174 muertos y más de 100 heridos, basándose en los datos proporcionados por la Agencia Regional de Gestión de Desastres de la provincia (BPBD).
Algunos perdieron la vida dentro del estadio en medio de empujones, pisoteos y por asfixia, mientras que otros fallecieron al llegar a los hospitales.
Las grabaciones que circulan en redes muestran a varias personas, entre ellas al menos un niño, que yacen en el suelo, aparentemente inconscientes.
Además de los daños materiales registrados en las instalaciones del estadio, un coche policial fue incendiado, mientras que otro quedó fuertemente dañado con cristales rotos y volcado de lado.
El Pepazo/RT Español