Lesiones y falta de control evitan que se quede permanentemente con el puesto
Brusdar Graterol posee una de las rectas más rápidas de todo el béisbol, pero hay algo que no termina de establecerlo como el cerrador de los Dodgers de Los Ángeles. Unos de los motivos que saltan a la vista es el control que el criollo posee sobre su slider y el irregular dominio que tiene sobre bateadores zurdos.
En 2022, el guariqueño enfrentó a 73 toleteros siniestros, dejando efectividad de 3.66 en 17.2 entradas de trabajo, donde además le batearon para promedio de .292, con WHIP de 1.47 y promedio de bolas puestas en juego (BABIP) de .351, muy en contraste al .198 que exhibe ante derechos, lo que significa que los rivales de la mano contraria son más capaces de descifrar sus envíos y hacer contacto.
No obstante, en cuatro zafras, los derechos le han bateado para OPS de .592 con par de jonrones en 292 apariciones al plato, mientas que los zurdos le registran OPS de .847 con 5 HRs en 183 apariciones.
Sin cerrador fijo
Los Dodgers por su parte, partirán esta temporada sin un hombre fijo para el puesto de cerrador, LA Times destaca que el derecho Evan Phillips; que fue el relevista más efectivo y durable del club en 2022, lanzará en las situaciones más importantes. Mientras que, Daniel Hudson también será parte del grupo que designe Dave Roberts, siempre y cuando sus persistentes molestias físicas se lo permitan.
Por lo tanto, eso deja al venezolano con un rol de preparador de mesa, o incluso lanzando en situaciones de más apremio, junto a Alex Vesia y Caleb Ferguson. Sin embargo, no es descartable que Graterol pueda actuar en el noveno inning.
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El Pepazo/Líder
