“La CPI: ejemplo de instituciones que se autodestruyen cuando sus representantes actúan por dinero, presiones poderosas o ambas.”
CÉSAR VERDUGA VÉLEZ
Luis Semprún Jurado
Al llegar a nuestra cita, en el Café de costumbre, encontré un alegre grupo que reía a placer ante algo que parecía haber dicho Anacleto. Este al verme me saludó con un ademán y se dirigió a mí al decir: “Carajo, camarita, le contaba a los amigos sobre la preocupación de Putin porque la Corte Penal Internacional emitió una «orden de arresto» en su contra y cómo eso le estaba «afectando» que hasta se le está cayendo el pelo. No parece extrañar a nadie que por fin ese mamotreto saliera de su ostracismo a solicitud de su amo gringo, quien por cierto amenazó a sus miembros si «osaban» enjuiciar a uno de sus soldados por crímenes de guerra, meses atrás. ¡Cómo que si no tuviésemos memoria! Un tal Karim Ahmad Khan, como Fiscal Jefe, antes Fiscal Superior de la Corona (UK) en 1995, con total «autonomía», «responsabilidad», en nombre del interés «social» y por el «bienestar» de unos niños ucranianos, imputó al Presidente Putin de «ser responsable de crímenes de guerra por la supuesta deportación ilegal de niños de Ucrania a Rusia». Ese es un mamarracho que no sabemos en qué planeta vive, ya que desde hace años Israel asesina NIÑOS todos los días en Palestina y él ha hecho mutis. ¿Dónde ha estado cuando policías, soldados y hasta colonos ilegales israelíes han masacrado niños palestinos durante años? «Ah, es que me voy enterando de lo de los niños ucranianos primero, luego, si me queda tiempo investigo lo otro». El muy hipócrita dice que «tiene motivos razonables para creer que Putin cometió los actos directamente, además de trabajar con otras personas para ello». El plan, camaritas, es crearle un expediente a Putin, al que saben que no pueden arrestar porque la CPI no tiene competencia para detener sospechosos y sólo tiene jurisdicción dentro de los países firmantes del acuerdo que se estableció en el Estatuto de Roma. Ni Rusia ni EEUU son firmantes de ese Estatuto. Y si están soñando que Rusia va a entregar a Putin, lean las declaraciones del ex-presidente ruso Dmitri Medvedev quien comparó la orden de arresto contra Putin con «papel higiénico», agregando: «ya saben para qué sirve». Es que «lawfare» es la nueva estrategia para tratar de eliminar jefes de gobiernos incómodos; con Rusia eso no funciona. Aquí cabe preguntar, camaradas, ¿por qué la CPI y su Fiscal Jefe estrella, el tal Khan (no lo confundan con el incomparable Alí Khan), no se han pronunciado, ni juzgado a nadie, por la intervención ilegal yanqui en Iraq, Siria, Libia, en el medio oriente y África y sus centenares de miles de muertos? ¿Por qué no ha juzgado a las autoridades de EEUU por su complicidad con el plan Cóndor y sus asesinatos de miles de latinoamericanos en siniestros años recientes en el siglo XX?; ¿por qué no ha juzgado a los responsables del gobierno israelí por el diario asesinato de hombres, mujeres y especialmente niños palestinos? Será el único que no tiene «motivos razonables» para creer en su culpabilidad. Tiene razón César al reflexionar: «La CPI: ejemplo de estupidez de instituciones, que se autodestruyen, cuando sus representantes actúan por dinero, presiones poderosas o ambas». ¡O sea!”
Todos conocemos las circunstancias por las que atraviesa la geopolítica mundial, las guerras declaradas, las no declaradas, las intervenciones ilegales, los financiamientos, las artimañas de los poderosos para hacerse de los bienes y recursos naturales de las naciones más débiles, las bases militares extranjeras para mantener el terror, la dura y directa amenaza a quien ose denunciar o enfrentar sus apetencias, y los innumerables recursos con los que cuentan, etcétera, pero casi olvidamos que han pasado 20 años desde que EEUU ilegalmente atacara y bombardeara Iraq con la excusa de las “armas de destrucción masiva” supuestamente en su poder, para luego declarar que “los habían engañado”, que no había tales armas… pero todo esto luego de más de UN MILLON de muertos y un país destruido, arrasado y saqueado por las fuerzas invasoras. Así es el imperialismo. ¿Dónde estuvieron la CPI y la ONU? ¿Quién osó solicitar una investigación criminal contra los invasores? ¿Quién puso a EEUU en el banquillo de los acusados? Ya sabemos lo que hizo Occidente, la ONU y la CPI: nada.
El seis de junio del 2020, el entonces presidente de EEUU, Donald Trump, dictó serias sanciones contra funcionarios de la Corte Penal Internacional, por considerar a la CPI una “institución corrupta” que “pretendía” investigar los posibles crímenes de guerra y de lesa humanidad que hubiera causado la actuación del Ejército de EEUU en Iraq y Afganistán (¿y los crímenes contra el resto del mundo qué?). La entonces Secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, leyó este comunicado (sic):»Las acciones de la Corte Penal Internacional son un ataque contra los derechos del pueblo estadounidense y amenazan con infringir nuestra soberanía nacional». EEUU siempre ha vivido de espaldas a la CPI, desde su fundación en 2002, pero desde hace tiempo planea acciones contra Rusia, entre ellas crear expedientes penales en especial contra su Presidente, Vladimir Putin. Por eso, Biden revoca las sanciones de Trump a la CPI el 03.04.2021 y la Corte Penal Internacional aplaudió la medida diciendo que “se abre una nueva era de cooperación con Washington.” Y vaya… ¡qué cooperación!
Así, la Corte Penal Internacional, con tan absurda e inviable decisión de dictar “orden de arresto” al Presidente Vladimir Putin, por demás estúpida pero solicitada por EEUU y su combo, se ha convertido en uno más de los vasallos de EEUU que difunden el conflicto en Ucrania y apoya a la cayapa occidental y su campaña contra Rusia y Putin. La rusofobia es mala consejera, porque a pesar de todos los “fake news” que publican sus “presstitutas”, Rusia va ganando la guerra. Y, ¿qué hará después la CPI, si ya nadie cree en ella? Justicia a base de “verdes” no es justicia; justicia a base de presiones y amenazas no es justicia; justicia por temor a sanciones ilegales no es justicia; justicia será justicia cuando los autores de los bombardeos contra el Donbass desde el 2014 para acá, con los que asesinaron a niños inocentes y a sus padres, sean juzgados y paguen por sus atroces crímenes. Recuerden lo que Göbbels hacía con los niños: los adoctrinaba. Así tratan de hacer los ucronazis convertidos en héroes y para eso necesitan a los niños que se salvaron emigrando a Rusia.
Pero la CPI no sólo ha encubierto los crímenes de guerra de EEUU e Israel, sino que Khan, como ex-Fiscal Superior de la Corona, ha protegido a su ex-patrón, que fue quien le consiguió el cargo actual, cuando tanto el gobierno del Reino Unido como sus Fueras Armadas fueron acusados de encubrir el asesinato de civiles por parte de tropas británicas en Afganistán e Irak, tras una investigación realizada por la BBC y el diario Sunday Times (ningunos angelitos) al entrevistar a ONCE detectives británicos que alegaron haber encontrado evidencia creíble de crímenes de guerra. Bueno, éstas fueron rechazadas por el Ministerio de Defensa de UK y eso le bastó a la CPI, porque “ellos no mienten”. Entonces, ¿por qué no le creen al Ministerio de Defensa Ruso ni al Presidente Putin? ¿Sugieren que ellos mienten? El 20 de marzo de 2003, EEUU y sus aliados, UK y España, invadieron Iraq. EEUU “aseguró” que el conflicto no duraría más de un par de meses y no finalizó hasta más de siete años después. No encontraron nada punible, pero saquearon sus riquezas, mataron a Hussein y a UN MILLÓN más.
Einstein tenía razón al decir una de sus bien conocidas frases: “solo hay dos cosas infinitas: el universo y la estupidez humana, y no estoy muy seguro de la primera”. La prueba más contundente son las declaraciones de “El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior”, el españolete Josep Borrell, quien celebró la orden de arresto y ha aseguró que esto «no es más que el principio del proceso de rendición de cuentas de Rusia y sus dirigentes». ¿Se olvida de la participación de España en la ilegal invasión a Iraq? No existía al momento ninguna autorización de la ONU por lo tanto fue un ACTO CRIMINAL con UN MILLÓN de muertos como resultado. ¿Por qué guardó silencio cuando invadieron Libia y asesinaron a Gadafi; o cuando lo de Yemen, o por los laboratorios de armas químicas encontrados en Ucrania? Es un cómplice silente junto a los países occidentales que conforman OTAN, que le tienen pavor a las sanciones de EEUU. Pero Alemania la botó de jonrón ya que sigue de lacayo de quien acabó con su industria y su desarrollo al sabotear los gasoductos Nord Stream.
Volviendo al caso de la CPI contra Putin… todo occidente condena la “guerra ilegal, injustificable y no provocada de Rusia”. Los hechos demuestran que eso es falso. La guerra en Ucrania fue provocada por las violaciones de la soberanía ucraniana orquestadas en 2004 y en 2014, seguidas de 8 años de guerra civil. Occidente inició la guerra cuando, violando la Carta de la ONU y la soberanía de Ucrania, EEUU y Canadá organizaron el derrocamiento del democráticamente electo presidente Viktor Yanukovich en 2014, con la supuesta “revolución de la dignidad”. Es importante recordar que en Derecho Internacional la guerra no es ilegal. La Carta de la ONU no prohíbe recurrir a la guerra. El Consejo de Seguridad de la ONU puede declarar guerras según los artículos desde el 39 al 51. Lo que pasa es que miembros permanentes del Consejo están enfrentándose en la guerra de Ucrania. Se logró poner fin a la guerra civil con los acuerdos de Minsk, que Rusia también firmó e hizo que el Consejo de Seguridad de la ONU lo avalara con la resolución 2202.
Previendo una mala jugada de occidente, Rusia logró que se agregara a la resolución 2202 del Consejo de Seguridad un anexo donde los presidentes de Francia, de Ucrania y de Rusia y la canciller alemana se hacían garantes de la aplicación de los Acuerdos firmados, comprometiendo con ello a sus respectivos países. La realidad no se hizo esperar y Ucrania no cumplió lo pactado; la hoy ex-canciller alemana Angela Merkel declaró hace poco que al firmar los Acuerdos de Minsk sólo querían ganar tiempo para que la OTAN pudiera armar al gobierno de Kiev; el hoy ex-presidente francés Francois Hollande confirmó lo dicho por la señora Merkel; el 24 de febrero de 2022, Rusia inició una operación militar especial por su “responsabilidad de proteger” a la población del Donbass. Según Thierry Meyssan, calificarla de “ilegal” sería como decir que durante el genocidio en Ruanda la intervención de Francia también fue ilegal y que había que permitir que continuara la masacre. O sea, permitir la exterminación de la población del Donbass, mayoritariamente rusoparlante.
El peor acto de guerra lo cometieron Angela Merkel y Francois Hollande al fingir que negociaban la paz y que comprometían a sus países a garantizarla. Según el Tribunal de Nuremberg, los “crímenes contra la paz” son aún más graves que los crímenes “contra la Humanidad”, porque no son la causa de tal o cual masacre sino la causa de la guerra misma. De ahí que Viacheslav Volodin, presidente de la Duma de Estado, haya solicitado la convocatoria de un nuevo Tribunal de Nuremberg para juzgar a Angela Merkel y a Francois Hollande. ¿Entendemos las percepciones del conflicto y lo distante entre ellas? ¿Entendemos que a EEUU no le interesa que esto se conozca? ¿Entienden por qué, de los 191 países que conforman la ONU, sólo 39 participan con las sanciones y proveen armas y financiamiento a Ucrania? Putin está claro en lo que hace y ha jugado acertadamente el ajedrez político con moderación, certeza, firmeza y buen tino. Ha movido sus piezas brillantemente y va ganando. Ah, y la “orden de arresto” de la CPI lo tiene muerto de risa, y su reunión con Xi Jinping, todo un éxito.
Para recibir en tu celular esta y otras informaciones, únete a nuestras redes sociales, síguenos en Instagram, Twitter y Facebook como @DiarioElPepazo
El Pepazo