Manuel Paredes
La situación de los venezolanos en otras latitudes y de los que habitamos en Venezuela se torna cada vez más difícil, no así para los países y organismos que realizan cumbres y encuentros en nombre de Venezuela y de la instauración de la democracia, aunque que al final su objetivo es conseguir una importante tajada en dólares, euros y yuanes en función de “socorrer” a los venezolanos,
Tomemos dos ejemplos: La Conferencia Internacional de Solidaridad con los Refugiados y Migrantes Venezolanos y sus países y comunidades de acogida de 2023, coorganizada por la Unión Europea y Canadá, en colaboración con ACNUR (la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados), la Organización Internacional para las
Migraciones (OIM), y la Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes de Venezuela (R4V).
En esta conferencia la Embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, Linda Thomas-Greenfield, anunció más de USD 140 millones en asistencia humanitaria adicional y más de USD 31 millones en asistencia para el desarrollo que contribuirán a la respuesta a la crisis regional de Venezuela. Esta asistencia incluye más de USD 56 millones a través de la Oficina de Población, Refugiados y Migración (PRM) del Departamento de Estado y más de USD 115 millones a través de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (United States Agency for International Development, USAID). Con esto, el total de la asistencia estadounidense asciende a más de USD 2.800 millones desde 2017, incluidos más de USD 2.500 millones en asistencia humanitaria y USD 387 millones en asistencia para el desarrollo.
Estos recursos no logran llegar a aquel venezolano que está en situación de calle en estos países y que sufre de la persecución y la xenofobia de los gobiernos así como de los propios habitantes de estos países, de esta manera acusan a los venezolanos de ser los causantes de la delincuencia y de la situación de crisis de los servicios públicos.
La otra actividad realizada para “ayudar” a los venezolanos la impulsó el gobierno de Gustavo Petro denominada la Cumbre sobre Venezuela con la presencia de 20 países, pero sin la representacion de los que padecemos la dictadura. Esta cumbre fue opacada por la crisis que generó la presencia de Guaido, quien manifestó haber sido expulsado de Colombia, aspecto negado por el gobierno colombiano, sin embargo, la realidad es que no se escuchó a la oposición venezolana y se siguió con el argumento según el cual la crisis migratoria y de miseria es producto del bloqueo, mientras tanto, no se hizo ninguna mención a los ingentes recursos del Estado dilapidados y saqueados por el régimen, puestos en evidencia por el propio gobierno de Maduro.
Lo cierto es que esta conferencia sirvió además para solicitar que se “debería fijar la fecha de las elecciones de 2024 y que los acuerdos entre el chavismo y la oposición se acompañen con el levantamiento de sanciones”, pero en el fondo fue para que Colombia hiciera un lobby con Estados Unidos y recibiera unos cuantos recursos para servir de control para la migración hacia este país, es así como esta nación norteamericana se dispuso a establecer centros regionales de procesamiento en Colombia y Guatemala.
Planteándose que de momento se contará con oficinas ya existentes y su objetivo es que luego haya centros específicos dedicados solo a esta tarea. De esta manera el gobierno de Petro tiene vinculación con los intereses del imperialismo norteamericano al jugar el papel de ser sede para que examinar si las personas que quieren emigrar a Estados Unidos cumplen los requisitos de los programas de asilo, laborales, de reunificación familiar o de otro tipo y qué alternativas tendría a su disposición el gobierno norteamericano. Esto sirva para demostrar a aquellos que acusan a Petro de comunista y aquí lo vemos pegadito con la política norteamericana al igual que el otro “progresista” de AMLO en México que sirven de contención a la migración hacia el Norte, no sin antes exigir unos cuantos millones de dólares para su papel de policías de migración.
Pero para que no se nos olvide que a la vez Venezuela es un territorio en disputa, aunque controlado por los imperialismos chino y ruso, estuvo el 18 de abril en el país para recordarnos que somos peones de su política guerrerista el canciller ruso Serguéi Lavrov, quien vino a solicitar apoyo para su guerra imperialista contra Ucrania y enseñar al régimen como eludir las sanciones para poder ampliar los negocios ilícitos sin controles, para tal fin les ofreció la tarjeta MIR, un sistema de pagos implementado por el Banco Central de Rusia, para sortear las sanciones internacionales.
Finalmente, encontramos a ciento de venezolanos secuestrados entre la frontera entre Chile y Peru, en Tacna, a quienes las autoridades peruanas no les permite el paso, en particular la Presidente de facto de Peru Dina Boluarte, quien desde su postura de derecha afirma que no da paso a venezolanos porque son delincuentes. Por su parte el
Presidente de Chile Gabriel Boric, considerado de izquierda, no permite tampoco que regresen también porque los considera ilegales y delincuentes, lo cierto es que muchos de ellos huyeron de la dictadura del país por la miseria y la falta de oportunidades, migraron sin pasaportes ni documentos de visa, aunque toda la comunidad internacional se había planteado ayudar a los migrantes venezolanos sin considerar estos trámites hoy ya no los tolera, sin embargo, si reciben todos los recursos del ACNUR, de la Unión Europea y de los Estados Unidos, son todos unos hipócritas, a los cuales no les interesa el drama venezolano.
Hoy podemos afirmar tal como lo reza la vieja consigna que solo el pueblo salva al pueblo, es necesario lograr la unidad de los venezolanos para salir de esta tragedia, levantar un programa de transformación y tomar las calles para exigir nuestros derechos por salario constitucional, contrataciones colectivas, respeto a los derechos
democráticos, libertad de los presos políticos y por un cambio del régimen.
De manera que se hace necesario articular todas las luchas en una sola y avanzar hacia la organización con un fuerte sentido de unidad en todas las formas de luchas, no existe nadie que desde afuera nos salve, no existe un mesias salvador, somos nosotros los venezolanos los que podremos derrotar este régimen.
Para recibir en tu celular esta y otras informaciones, únete a nuestras redes sociales, síguenos en Instagram, Twitter y Facebook como @DiarioElPepazo
El Pepazo