Las víctimas: 11 deportistas de la delegación israelí, más un policía y cinco terroristas, fedayines –los que se sacrifican– palestinos del Movimiento Septiembre Negro. Todo por una causa política: pedían la liberación de 238 presos. Andreas Baader y Ulrike Biraam del Ejército Rojo, confinados en Alemania, y el resto privados de libertad en Israel.
Luis Carlucho Martín
¿Quién puede dudar que el deporte es un fenómeno social, político y de amplio espectro cultural, con intrínseco componente formativo, de salud e histórico?
Mira este ejemplo: Hoy hace 51 años de la Masacre de Munich, acción terrorista que tuvo como escenario los juegos olímipicos de 1972 y como protagonistas, a 11 deportistas de la delegación israelí, más un policía y cinco terroristas, fedayines –los que se sacrifican– palestinos del Movimiento Septiembre Negro.
Moshe Weinberg (entrenador de lucha libre), Yossef Romano (halterofilista), Ze’ev Friedman (halterofilista), David Berger (halterofilista), Yakov Springer (juez de pesas), Eliezer Halfin (luchador), Yossef Gutfreund (árbitro de lucha libre), Kehat Shorr (entrenador de tiro), Mark Slavin (luchador grecorromano), Andre Spitzer (entrenador de esgrima), Amitzur Shapira (entrenador de atletismo), es la lista de los atletas y entrenadores asesinados. Se suman a las cifras rojas, los secuestradores Luttif Afif (alias Issa líder), Yusuf Nazzal (Tony), Afif Ahmed Hamid, Khalid Jawad, Ahmed Chic Thaa. Y otra víctima fue el policía alemán Anton Fliegebauer. Sobrevivieron los terroristas Mohammed Safady, Adnan Al Gashey y su sobrino Jamal Al-Gashey, arrestados y liberados dos meses después…y luego protagonizaron el secuestro de un avión de Lufthansa…
Todo por una causa política: pedían la liberación de 238 presos. Andreas Baader y Ulrike Biraam del Ejército Rojo, confinados en Alemania, y el resto privados de libertad en Israel.
El criminal acto y su fatal y triste desenlace fue otro duro golpe para la imagen de los teutones, porque cargaban en sus espaldas el peso histórico de los Juegos de Berlín 36, donde la supremacía nazi y la tan promovida superioridad aria fueron mancilladas por la capacidad atlética de un “negrito” estadounidense, estudiante de Ohio, un tal Jesse Owens, quien no solo humilló a Hitler en su patio al colgarse cuatro preseas doradas: 100 metros con registro de 10:3; 200 metros con marca de 20:7; salto largo con 8.06 metros y relevo 4×100, con 39:80, sino que además batió 8 marcas mundiales.
En Munich la mancha fue de sangre. Quedó al desnudo la incapacidad de los alemanes para poner orden en su casa. Los reportes indican que varios expertos en seguridad habían previsto escenarios de terrorismo, como el acontecido, pero la torpe sordera de los organizadores abrió la puerta a tan sombrío capítulo.
Pronunciamientos, exequias y algunas lógicas retiradas, pero los juegos de Munich 72, a pesar del atentado, en segunda semana de actividad, no se suspendieron.
…Casi en tono trágico Estados Unidos cae sorpresivamente en la final del baloncesto masculino 51-50 ante su mega rival de la Guerra Fría, URSS.
No obstante, como cobrando venganza, el rey de estas ensangrentadas competiciones fue el tritón estadounidense Mark Spitz, con siete doradas: 100 y 200 libres con registros de 51:22 y 1:53:73, respectivamente; 4×100 y 4×200 libres con marcas de 3:26:42 y 7:35:78; además de 100 mariposa con 54:27; 200 mariposa con 2:00:7 y 4×100 estilos con 3:48:16…
Aquello fue una terrible experiencia de sentimientos diametralmente opuestos. La sensatez y el humanismo, quizás, esperaban la cancelación del certamen. Por otro lado, la mascota Waldi y los más de 7 mil 123 atletas convocados de 122 países se toparon porque la competencia es la base del deporte de alto rendimiento, más aún en cita olímpica, que por vez primera tuvo el juramento de los atletas en una mujer, la anfitriona velocista Heidi Shuller.
Así queda demostrado que deporte y política están indisolublemente atados por una cuerda histórica…¿o no?.
Para recibir en tu celular esta y otras informaciones, únete a nuestras redes sociales, síguenos en Instagram, Twitter y Facebook como @DiarioElPepazo
El Pepazo