La debilidad del suelo pélvico y la disfunción eréctil

El urólogo es quien debe diagnosticar y determinar el tratamiento de la disfunción eréctil, ya que puede ser un síntoma de afecciones médicas subyacentes, como enfermedades cardiovasculares o diabetes, que también deben ser tratadas. Otros profesionales de la salud pueden contribuir a mejorar aspectos concretos; en el tema que nos ocupa, los fisioterapeutas pueden aconsejar ejercicios, herramientas y hábitos de vida para fortalecer la musculatura del suelo pélvico.

Función sexual del suelo pélvico

Estas son las cuatro funciones principales del suelo pélvico:

• Función de sostén de los órganos de la cavidad abdominal y pélvica.
• Función de continencia, regulando el funcionamiento de apertura y cierre de los esfínteres en la micción y en la defecación.
• Función sexual, contribuyendo a mejorar la calidad de las relaciones sexuales.
• Función reproductiva, al actuar como conductor del feto durante el parto.

El suelo pélvico está formado, tal y como explica Melanie Fernández Lago, fisioterapeuta especialista en Uroginecología y Suelo Pélvico de Onelife Center, “por una serie de músculos que intervienen directamente en el mantenimiento de la erección y la eyaculación del líquido seminal”. En especial, se trata de los músculos isquiocavernoso y el bulbocavernoso. “El bulbocavernoso se proyecta hacia el dorso del pene, comprimiendo la vena dorsal y evitando así que se produzca la fuga venosa y, por lo tanto, la pérdida de la turgencia del pene”, señala la experta. De ahí que, “si existe alguna afectación funcional en el plano del suelo pélvico, puede verse afectada la función sexual”.

Un factor más dentro de un problema complejo

El papel de un suelo pélvico débil en la disfunción eréctil es controvertido. Javier Hernández, urólogo del Hospital Vithas 9 de Octubre, en Valencia, asegura que “la erección es un mecanismo netamente vascular, con un control neurálgico y neuroendocrino muy estricto y conocido”. En este sentido, resalta que la influencia del suelo pélvico “no está descrita”.

En cambio, el urólogo François Peinado, jefe del Servicio de Urología del Hospital Ruber Juan Bravo, en Madrid, cree que si existe una relación, aunque subraya que “no es directa ni única”, ya que la disfunción eréctil “es un problema complejo que puede tener múltiples causas, y la debilidad del suelo pélvico es solo una de las posibles influencias”. Estas son algunas de las posibles contribuciones de esta región a una mejor o peor función eréctil:

Control de la erección

El suelo pélvico juega un papel en el control de la erección y la eyaculación. Un suelo pélvico débil podría afectar a la capacidad de mantener una erección firme y el control sobre la eyaculación, lo que podría contribuir a la disfunción eréctil.

Circulación sanguínea

La función eréctil depende en gran medida del flujo sanguíneo hacia el pene. Un suelo pélvico debilitado podría influir en la circulación sanguínea en la región pélvica, lo que podría dificultar la capacidad del pene para llenarse de sangre y mantener una erección.

Ansiedad y estrés

La debilidad del suelo pélvico puede estar asociada con problemas de incontinencia urinaria o fecal, así como con dolor pélvico crónico. Estos problemas pueden generar ansiedad, estrés y una disminución de la autoestima, lo que a su vez puede contribuir a la disfunción eréctil.

Músculos del suelo pélvico y erección

Algunos estudios sugieren que el entrenamiento de los músculos del suelo pélvico a través de ejercicios específicos, como los de Kegel, puede ayudar a mejorar la función eréctil en hombres con debilidad en esta región. En definitiva, fortalecer estos músculos podría tener un impacto positivo en la capacidad de mantener una erección.

Cómo tener un suelo pélvico fuerte

Fernández apunta que existen diversos ejercicios que los fisioterapeutas suelen aconsejar a los pacientes con disfunción eréctil y recalca que el papel de estos profesionales también es inculcarles la importancia de esta parte del cuerpo y la necesidad de adoptar unos hábitos de vida que favorezcan la fortaleza de los músculos que la conforman.

Los factores de riesgo asociados a la debilidad del suelo pélvico masculino son el sedentarismo, tabaquismo, diabetes, sobrepeso, patología respiratoria, estreñimiento, el levantamiento excesivo de cargas (en el que no existe una buena gestión de la presión abdominal) y procesos quirúrgicos de la región abdominal o pelviperineal (como la cirugía de extirpación del cáncer de próstata).

Ejercicios para el fortalecimiento del suelo pélvico masculino

Los ejercicios para fortalecer el suelo pélvico no son exactamente los mismos que se realizan en el caso de la debilidad del suelo pélvico femenino, ya que existen algunas diferencias, sobre todo anatómicas.

En algunos casos son similares; por ejemplo, la contracción del suelo pélvico de una manera global se basa en dar la orden de cortar el chorro de orina -pero sin hacerlo realmente, solo se trata de imitar ese gesto- o la de aguantar las ganas de un gas.

Pero también hay otros ejercicios más específicos, en los que la órden será, por ejemplo, pedir que se intente retraer el pene.

Otras opciones para evitar la debilidad pélvica

El uso de electroterapia a nivel del pene, la estimulación a base de vibración y el uso de la bomba de vacío son algunas de las herramientas que pueden contribuir a mejorar la funcionalidad de esta región, en combinación con cambios de hábitos y ejercicio de fortalecimiento de la región lumbopélvica.

En casos graves de debilidad del suelo pélvico, como el prolapso de órganos pélvicos, puede ser necesario realizar una cirugía para reparar los tejidos y restaurar la función. Además, en algunos supuestos se pueden recetar medicamentos para tratar síntomas relacionados con la debilidad del suelo pélvico, como la incontinencia urinaria.