Los Thunder ya no son una hipótesis. El nivel que están mostrando cada noche refleja una realidad. Oklahoma comenzó la temporada como una de las grandes sorpresas, con la unión Shai-Holmgren maravillando al mundo, pero están listos para dar el salto y, al menos, competir en su conferencia.

En el partido de la jornada, los de Daigneault recibían a unos Timberwolves de dulce, primeros en el Oeste (22-7 tras la derrota de anoche), pero que no se sintieron cómodos en ningún momento (129-106). La versatilidad del quinteto de los Thunder, unida al poderío defensivo y a la eficacia en ataque fueron demasiado para los de Minnesota.

Shai volvió a llevar la batuta. Anota, genera, defiende, roba, tapona…por algo es uno de los mejores jugadores de la liga y candidato perenne al MVP. Acompañaban su ritmo los de siempre, un quinteto difícilmente igualable en la NBA y con mil recursos en ataque y defensa.

Un quinteto de ensueño

Si por algo se han caracterizado los Thunder en lo que va de temporada, además de por el nivel de sus jóvenes, es por la versatilidad que tienen en su plantilla. Un roster completo que es una amenaza constante para los rivales. En especial, su quinteto. Anoche, vs Timberwolves, volvió a ser decisivo.

Victoria de mérito, de las que retumban. Los Thunder están 19-9, terceros en el Oeste y han demostrado que son capaces de competir con cualquiera. La etiqueta de sorpresa ya se les queda pequeña. Quieren confirmar que, aparte de ser el mejor núcleo joven de la liga, pelearán por el anillo dentro de muy poco.