Se muestra confiado en ganar la medalla de oro olímpica en su país
Con la confianza de quien se sabe intocable en este momento, Jake Paul ha mostrado esta semana sus intenciones de participar el los próximo Juegos Olímpicos que se celebrarán en Los Ángeles en 2028. El de Cleveland (Ohio), ha estado siguiendo de cerca el boxeo olímpico en París y se ha mostrado activo en las redes, sobre todo, a raíz de la polémica surgida en torno a la boxeadora Imane Khelif.
Su récord como boxeador de 10-1 ha hecho que su confianza despegara como un cohete, especialmente tras la victoria del mes pasado ante Mike Perry que le ha dejado el camino libre para el histórico enfrentamiento en noviembre contra Mike Tyson.
Objetivo marcado… con un inconveniente
Quizás por eso, y por que no haya habido ningún estadounidense compitiendo por medallas en esta modalidad dentro de los Juegos de París, dijo esto en el podcast BS with Jake Paul: «Estoy harto de esperar, y de que no consigamos otro oro para el equipo de Estados Unidos, por ello voy a trabajar más duro en los próximos años con el objetivo de estar en Los Ángeles 2028». A lo que añadió: «Lo habéis escuchado aquí en primicia, quiero y voy a estar en Los Ángeles; medalla de oro, ¡eres mía!».
Y es que al chico de oro le llueven las ofertas en los últimos meses, no sólo con el combate contra Tyson, que inaugurará las retransmisiones deportivas en Netflix, sino por comentarios como los de Butterbeam (ex boxeador de 57 años) ofreciéndole 2 millones de euros por pelear contra él.
Mientras, el boxeador pasa los días previos a la conferencia de prensa del domingo 18 de agosto para promocionar la pelea con Tyson, junto a uno de los personajes de moda de este verano, Kylian Mbappé, con quien éste estuvo en sus vacaciones norteamericanas tras disputar la Eurocopa de Alemania.
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El Pepazo/Marca