El criollo sumó otra jornada productiva se fue de 4-2 con dos carreras impulsadas y una anotada. Ya mete miedo y está empeñdo en asaltar el liderato de bateo. Su bate fue clave para el cuarto triunfo en fila de los de Padres de San Diego
Theoscar Mogollón González
Los Padres de San Diego siguen encendidos en esta segunda mitad de temporada, algo que sin dudas querrán mantener de cara a esa competencia por un puesto en el Comodín de la Liga Nacional. Para esta ocasión, y como ya parece ser costumbre, contaron con el oportuno bate de Luis Arráez.
Arráez y su regadera en Washington
A estas alturas ya muchos saben que los Nacionales de Washington son una de las víctimas favoritas de Luis Arráez, sin mencionar que dicho estadio es ideal para conectar buenos batazos, según palabras de él mismo. En la noche de este miércoles se fue de 4-2 con dos carreras impulsadas y una anotada.
Acto seguido, el venezolano también anotó luego de que Jurickson Profar conectara su jonrón 16 de la temporada. Fue así como tomaron ventaja de 4 a 2 en ese entonces, lo que los motivó a extender su fiesta de batazos en las siguientes entradas. Cabe añadir que falló en el tercero con un hombre en la antesala, y luego en el cuarto con otro en la inicial.
Con esta nueva jornada multihit, la sexta en el mes de julio, ahora Luis Arráez batea para .311/.345/.388 luego de 98 encuentros, con 129 imparables en 415 visitas al plato, 19 dobles, dos triples, tres cuadrangulares, 28 carreras impulsadas, 52 anotadas, y .733 de OPS.
Eugenio Suárez lidera ofensiva de Arizona con su jonrón 12
El poder de Eugenio Suárez sigue haciéndose sentir en su primera temporada con los D-backs de Arizona
En la noche de este miércoles se desarrolla el último careo de la serie entre D-backs de Arizona y Reales de Kansas City, quienes se han sacado chispas desde el mismo lunes. Con la intención de balancear las cosas a favor de los suyos, Eugenio Suárez se hizo presente en el marcador con un soberbio batazo.
Para esta ocasión, Geno sorprendió a más de uno con su descomunal elevado de 416 pies, el cual aterrizó por todo el jardin izquierdo. Dicha conexión apareció en la parte alta del segundo inning, cuando en cuenta de 2 y 2 no perdonó un cambio por el medio para darle con todo. Fue así como rompió el cero en la pizarra.
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El Pepazo/Meridiano
