Quartararo, tercero y Aleix dice adiós, con Marc Márquez, séptim
Pecco Bagnaia ganó la carrera de MotoGP en Malasia. La séptima del año le vale para acariciar el título, pero no lo pudo cerrar, pues Quartararo fue tercero. Ahora el italiano le saca 23 puntos al francés.
Todos miraban al cielo antes de empezar, pues se anunciaba tormenta para esa hora. Pero no llegaba, con lo que la carrera fue declarada en seco. Con calor, pero menos que otros días: 31 grados en el ambiente y 38 en el asfalto. Por eso, todos salieron con los mismos neumáticos: medio, delante y blando, detrás. Se guardó un minuto de aplauso por el fallecimiento de Dietrich Mateschitz, cofundador de Red Bull. Nagashima suplía al lesionado Nakagami, en LCR Honda.
Aleix se veía envuelto en luchas que no le hacían crecer y se veía rebasado por Brad Binder y Bezzecchi. Mir acechaba a Quartararo.
‘Martinator’ tiraba y se iba un segundo del dúo Bagnaia-Bastianini, que se marcharon de Marc. Morbidelli pasaba a Mir, pero tenía pendiente una sanción de pasar dos veces por la zona de la ‘Long Lap’. Álex Márquez también arrastraba una penalización de un paso por tirar a Miller en Australia.
El mayor de los Márquez sufría para girar y se veía adelantado por Quartararo. Peor le iba a Aleix, que bajaba al 15º. Viñales también padecía muchísimo con la Aprilia y era 19º.
Nagashima se caía en la curva 9. Estaba en las últimas posiciones.
Bastianini se contenía y no atacaba a Bagnaia. Desde Ducati decían que no había órdenes de equipo, pero el título estaba en sus manos.
A falta de 14 vueltas cambió todo: Jorge Martín se fue al suelo. Le sacaba 1.2 al dúo italiano liderando.
Quartararo se había visto beneficiado por el ‘tapón’ que Marc hizo a Mir, Rins y Bezzecchi. El amigo de Pecco, también de la Academia VR46, superaba a las Suzuki y Marc y se lanzaba a por El Diablo. Le tenía a 1.6 segundos. Ahí estaba el título.
Joan Mir, al fin, consolidaba su pasada sobre Marc Márquez y tomaba unos metros. Rins intentaba imitar a su compañero de Suzuki.
La Bestia adelantaba a Bagnaia en la curva 4 para sorpresa -y más sudores- en Ducati. Darryn Binder se iba al suelo, pugnaba por puntuar.
Poco a poco, Bezzecchi se iba aproximando a Quartararo. Rins también superaba a Marc Márquez que ahora se veía agobiado por Brad Binder. No había opción para el de Cervera de hacer nada destacable.
Sin embargo, Rins adelantó a Mir, quien también cedió frente a Marc. Por detrás, Aleix subía, pero sólo al undécimo.
Los nervios se hacían patentes en el muro de Ducati, pues Pecco estaba pegado a Enea. ¿Le daban una orden o no? Hasta había un cónclave entre Davide Tardozzi, Paolo Ciabatti y Gigi Dall’Igna.
Restando seis giros, Bagnaia adelantaba a Bastianini para volver a ser primero. El Mundial volvía a estar en un adelantamiento de ‘Bez’ a Fabio.
El problema para los de Borgo Panigale era que El Diablo resucitaba y mantenía a raya a Bezzecchi y hasta recortaba a los dos de cabeza.
Mir tenía muchos problemas y perdía posiciones a gran velocidad. Hasta Aleix le rebasó justo antes de que Joan se fuera al suelo. No es su año.
Lin Jarvis apretaba el puño al ver que Quartararo dejaba atrás a Bezzecchi. Gran reacción y con el dedo corazón izquierdo fracturado.
Bastianini volvía a pegarse a Bagnaia cuando afrontaron la última vuelta. Hasta tuvo que abrirse en una curva para no dar al teórico número 1 de Ducati. Ganó el ’63’, que acaricia el título, pero no lo cerró por el tesón de Quartararo. Miller superó al final a Marc Márquez y le dejó séptimo. Aleix, sólo décimo, ya dice adiós a sus opciones.
Bagnaia era el más feliz, claro. «Hice la mejor salida de mi vida. Estoy muy contento», afirmó.