La idea no es llenar una botella con agua del mar y beberla.  Lo que propone Téllez es diluir agua marina tratada y filtrada (potable) en agua del grifo normal en proporciones de entre 50 y 100ml por cada litro de agua. Él recomienda ingerir este agua a lo largo del día y combinarlo con agua normal, si es necesario.

Según nuestro entrenador personal, “beber agua marina en combinación con agua del grifo aliviará la sed antes y durante más tiempo, al reponer las sales minerales perdidas”. Para quien piense que el agua marina, al tener sodio, nos dará más sed, se equivoca, ya que “este agua, además de sodio, incluye otros minerales necesarios para el cuerpo”.

En cuanto al tope de agua marina que se puede beber al día, los expertos señalan que sería suficiente con entre 30 y 50 ml al día, siendo el límite máximo tolerado por el cuerpo de 500 ml. Eso sí, estas recomendaciones son para personas sanas y que no tienen ninguna patología o problema de salud. En estos casos, siempre hay que consultar con un especialista para evitar problemas.

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