La inyección de bótox en el estómago en Turquía es la causa que está detrás del brote de botulismo en Europa. Se trata de un procedimiento preoperatorio que persigue que el paciente baje de peso de forma moderada.
Alicia Cruz Acal
El botulismo es una enfermedad causada por la bacteria Clostridium botulinum, la misma que se utiliza en la fabricación de bótox. Se trata de una afección poco frecuente, pero que puede llegar a ser mortal si no se trata a tiempo. Normalmente, esta bacteria entra en el organismo debido a heridas o por ingerirla a través de alimentos mal conservados o mal enlatados.
La inyección de toxina botulínica en el aparato digestivo “no se relaciona con la cirugía como tal. Según mi formación, nunca hemos considerado la utilización de toxina en los pacientes que hemos operado”, afirma Eduardo Targarona, cirujano experto en Cirugía Bariátrica de un grupo multidisciplinar de Endoscopia-Cirugía Bariátrica y Metabólica. Entonces, ¿por qué y de qué forma se ha utilizado esta sustancia para perder peso?
Para dar respuesta a esta cuestión, primero debemos entender cómo actúa la misma en nuestro organismo. “La toxina botulínica produce la parálisis de la musculatura que, generalmente, movemos de forma voluntaria”, explica Amador García Ruiz, vicepresidente de la Sociedad Española de Cirugía de la Obesidad (SECO). Es, por ejemplo, lo que sucede en medicina estética: “Se inyecta toxina en los ojos o en los labios para que el músculo se relaje y la piel no tenga arrugas. Esto sería la misma idea, solo que la inyección tiene lugar en la cavidad gástrica, en el estómago”, añade Targarona.
Así, como detallan los expertos consultados por CuídatePlus, al paralizar los nervios, el estómago no se mueve y se dilata, por lo que aumenta la sensación de saciedad. El efecto producido sería similar al de colocar un balón gástrico. Como cree Targarona, “seguramente esto es lo que ha sucedido en Turquía porque durante la cirugía no se suele realizar”.
El experto en Cirugía Bariátrica señala que hay dos formas de entender por qué se lleva a cabo esta práctica. La primera sería como una técnica subclínica, es decir, “en pacientes que no tienen una obesidad mórbida y sí indicación quirúrgica”. La segunda sería para aquellos que sufren “una superobesidad con mucho más riesgo quirúrgico. Si inyectas esta toxina, la operación es más fácil”. Entonces, ¿el bótox en el estómago ayuda realmente a perder peso? “En la teoría diría que sí, pero en la práctica no está científicamente demostrado. No hay evidencia científica suficiente que justifique este uso ni este mecanismo de acción”, contesta García.
¿Por qué hay riesgo de botulismo con la toxina botulínica?
Como ya se ha mencionado, la toxina botulínica se fabrica con la misma bacteria que provoca el botulismo. En los casos registrados de esta enfermedad en Turquía posiblemente, según Targarona, se ha podido producir una sobredosis o que la toxina haya estado más purificada: “Imagínate que te tienen que inyectar un centímetro cúbico, pero te inyectan cinco. Si te dan un fármaco que está más concentrado, te hace más efecto”, expresa el especialista.
“En las guías de cirugía, la toxina no se contempla. En todo caso sería en medidas prácticas, no quirúrgicas”, subraya Targarona, quien recuerda que “cualquier tipo de tratamiento tiene que estar basado en información y datos objetivos, por lo que hay que desconfiar de los centros que no ofrecen esta calidad”.
Síntomas y tratamiento del botulismo
Los síntomas que esta toxina causa no suelen manifestarse hasta entre 12 y 36 horas después. Los expertos indican que los principales son los siguientes:
- Dificultad respiratoria, ya que los músculos se paralizan.
- Fatiga intensa.
- Vértigo.
- Debilidad.
- Complicaciones en el habla.
- Inflamación abdominal.
- Diarrea.
- Estreñimiento.
- Vómitos.
Para tratar la enfermedad se recurre a un medicamento que se conoce como antitoxina, que se debe administrar lo antes posible para reducir la tasa de mortalidad. Según el ECDC, este fármaco evita que la toxina provoque más daño al organismo.
Por otro lado, existen casos de botulismo que requieren tratamiento de apoyo, especialmente de ventilación mecánica, que puede ser necesario durante semanas o meses. Además, los antibióticos no son obligatorios, exceptuando en los casos de botulismo por heridas.
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El Pepazo/Marca/Cuídate