Shannon Ramirez
Pasante
Mucho se ha hablado sobre el rescate de los cuatros menores desaparecidos en la selva del Guaviare-Colombia, pero la verdad sobre su salida de la Amazonia poco se sabe.
El padre de los niños, Manuel Ranoque, era gobernador del Resguardo Indígena de Puerto Sábalo, un lugar aislado y de poco acceso, donde las vías de entrada y salida son por aire o ríos. Un día, Manuel desapareció sin dejar noticia alguna, y mucho tiempo después llamo a su familia para que se reencontraran.
Fidencio Valencia, quien es tío de la madre de los niños, le cuenta al Diario El País, que a través de una llamada telefónica «el papá les dijo: Vengan rápido, rápido, rápido. Por eso se embarcaron mi sobrina y los hijos en ese avión. Él tiene la culpa”. El tío de Magdalena Mucutuy cree que nunca debieron haber subido a la Cessna 206, matrícula HK 2803, pilotada por un hombre que antes había sido taxista.
La verdad sobre la huida del padre de los niños es la amenaza que recibió por parte de guerrilleros, haciendo que este se fuese a Villavicencio y luego de encontrarse con su familia irían a la ciudad de Bogotá.
Manuel Ranoque le exigió al estado colombiano a través de las cámaras de Caracol Internacional que se le asegure la protección e integridad a sus hijos y su persona, así mismo, educación y una vivienda en la ciudad de Bogotá, pues toda la situación que estaban viviendo era por la persecución de los grupos irregulares en la región de la Amazonia.
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El Pepazo