Hay muchas formas de tomar café y muchas otras de endulzarlo aunque la mayoría lo hace con una, dos o tres cucharadas de azúcar ¿por qué? por su sabor amargo que no a todo el mundo gusta. Te damos un truco para hacerlo más dulce sin echar azúcar.
El café es la bebida estrella de los españoles en los desayunos y en las sobremesas. Todos los adultos, en mayor o menor medida, han consumido café alguna vez en su vida y un alto porcentaje sigue haciéndolo. Según datos de la Asociación Nacional del Café, en España se consumen al año 3,81 kilos por persona, el equivalente a más de 500 tazas. Aunque parece una cifra alta, la realidad es que no lo es tanto. De hecho, España no es uno de los países más cafeteros. Es más, a nivel europeo, nuestro país registra uno de los consumos de café per cápita más bajos, si bien no difiere mucho del consumo que tienen países de su entorno geográfico como son Francia y Portugal.
Aun así, el café sigue siendo la bebida por excelencia en los desayunos de los adultos y no sólo por su tradición. Y es que, además de mantenernos despiertos por su contenido en cafeína, también tiene otras muchas propiedades para la salud. Como informa Vicente Javier Clemente Suárez, catedrático en Ciencias del Deporte y Nutricionista en la Universidad Europea, “el café tiene múltiples beneficios para la salud. Puede mejorar la concentración y el estado de alerta, contiene antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres, y estudios sugieren que puede reducir el riesgo de ciertas enfermedades como el Parkinson, la diabetes tipo 2 y enfermedades hepáticas”.
Ahora bien, aunque hay personas a las que les guste el sabor del café por sí solo y sin añadir nada, la realidad es que casi siempre se toma con leche y endulzado, normalmente con azúcar, también se usan “alternativas como la miel o la stevia”.
Tal y como indica Clemente Suárez, en España, el café se consume de diversas maneras pero “los tipos más comunes incluyen el café solo (espresso), café con leche, cortado (espresso con un poco de leche) y el café con hielo, aunque también es habitual encontrar el café americano y el carajillo (café con un licor fuerte como brandy o whisky)” y en casi todas las versiones se usa el azúcar para endulzar. ¿Por qué? porque el sabor amargo del café no le gusta a todo el mundo.
La buena noticia es que hay otra forma de endulzar el café sin tener que recurrir al azúcar y que, además, te ayudará a reducir el consumo de esta sustancia.
Cómo endulzar el café sin nada dulce
Algunas opciones saludables para endulzar el café, según el experto, pasan por “el uso de especias como la canela o la vainilla, que aportan dulzura sin calorías adicionales». Pero, además, hay otra fórmula más sorprendente: “Echar una pizca de sal al café”. Como informa el nutricionista de la Universidad Europea “este gesto puede ayudar a reducir su amargor y a resaltar su dulzor natural”. Esto es así porque, como informa, “la sal contrarresta los compuestos amargos presentes en el café, mejorando su sabor general”.
Y es que, “además de reducir el amargor, la sal puede mejorar la percepción de otros sabores, haciendo que el café tenga un sabor más equilibrado y agradable al paladar”.
Esta forma de endulzar el café es una buena opción para aquellos que quieren reducir el consumo de azúcar de su dieta pero también para aquellas “personas que tienen sensibilidad a los sabores amargos ya que esto podría mejorar su experiencia con el café”. También puede ser útil “para aquellos que buscan reducir su consumo de azúcar sin sacrificar el sabor.
Por el contrario, no podrían usar este truco aquellas personas que tienen problemas de salud como “la hipertensión arterial”. Por lo tanto, señala el experto, “es importante añadir solo una pequeña cantidad de sal al café”.
El Pepazo/Marca/Cuídate