Luces y sombras para los Dallas Mavericks en su primer partido del año 2024. Por un lado, celebraron el regreso de Kyrie Irving, ausente durante 12 encuentros por lesión, pero en lo deportivo no pudieron empezar peor, con una paliza en Utah, 127-90 y, sobre todo, una endeble imagen impropia de un equipo que aspira a grandes cosas en la temporada.

Irving llevaba 12 partidos fuera. En ese tiempo los Mavs firmaron un balance de 6-6 y la llegada del base se esperaba como agua de mayo. 14 puntos aportó en el partido en Salt Lake City además de 9 rebotes y 4 asistencias en 32 minutos de juego. Ya confirmó Jason Kidd que Irving no tendría restricciones de minutos en su regreso a las pistas.

El partido para Dallas se puso pronto cuesta arriba y los Jazz lo manejaron mucho mejor. Fueron por delante todo el tiempo e incluso se permitieron un 34-11 en el último cuarto para cimentar la paliza sobre el equipo tejano.

La derrota para los Mavs supone la segunda en ocho enfrentamientos ante los Jazz y la tercera en sus últimos cuatro partidos en el campeonato, además de ser uno de los peores partidos de la temporada para Luka Doncic.

No estuvo nada fino el esloveno. Acabó con 19 puntos, que es su tercera peor anotación de la campaña, y la más baja desde los 16 del 15 de noviembre. Luka firmó un partido errático con 6 de 20 en tiros de campo, incluyendo un 3 de 13 en triples, y cuatro pérdidas. Aún así se acercó al triple-doble añadiendo 14 asistencias y 6 rebotes.

El que vivió una noche mágica en Salt Lake City fue Jordan Clarkson. El de los Jazz logró el primer triple-doble de su carrera con 20 puntos, 11 asistencias y 10 rebotes, que es además el primer TD de los Jazz desde que lo lograra Carlos Boozer en 2008, y el primero de la franquicia en 40 años de un jugador saliendo dese el banquillo desde los 12 puntos, 14 rebotes y 12 tapones de Mark Eaton el 5 de febrero de 1983.

Los Suns se han acostumbrado a ganar y ya suman cuatro victorias seguidas, y esta última sin su ‘Big Three’. Bradley Beal comandó las acciones en Arizona para el 109-88 de los locales sobre Portland, demostrando que ha dado un paso adelante. Booker no estuvo demasiado inspirado pero añadió 10 puntos, y el que se lo perdió fue Kevin Durant.

KD no saltó a la pista por un problema de isquiotibiales «nada grave para acabar el partido el domingo pero algo más serio como para no jugar hoy», comentaba el entrenador Frank Vogel.

Sin Durant fue Beal, que ya despierta admiración en Phoenix, el que tiró del carro: «Lo cambia todo. Su presencia nos hace mejores, es así de simple. Dependemos de él», decía sobre su compañero el pívot Jusuf Nurkic.

Y si los Knicks estrenaron con victoria, y además brillante, el primer partido de OG Anunoby en la Gran Manzana, los Raptors, el equipo con el que se hizo la operación, también celebró ganando la llegada de sus nuevos inquilinos.