José Andrade
La niña Quenia Gabriela Oliveira Matos de Lima, de dos años, es la víctima de un devastador caso de maltrato infantil que tuvo lugar en Guaratiba, Brasil.
Su propio padre y su madrastra serían los responsables de la muerte de la pequeña, cuya muerte se demostró el nueve de marzo. Ese día la llevaron a un hospital en un aparente estado de inconciencia.
Los médicos encontraron que la pequeña tenía al menos una hora de haber muerto. Tras revisarla, hallaron un total de 59 lesiones, de vieja y reciente data, en todo su cuerpo, lo que evidenció el severo maltrato al que era sometida.
La mayoría de las heridas las tenía en la cara, el abdomen y la espalda. Además los médicos encontraron signos de abuso sexual.
El caso se descubrió cuando el papá y la madrastra de la nena buscaron ayuda médica, porque “no respiraba”, tras sufrir una supuesta caída.
La médico que la atendió, Ana Cláudia Regert, le practicó RCP, y enseguida notó que la versión de los papás no encajaba con lo que veían.
“Cuando la subimos a la camilla y la desnudamos para iniciar las maniobras, estaba claro que se trataba de lesiones que no acababan de ocurrir ayer. Estas eran cosas que habían estado sucediendo durante mucho tiempo. Había quemaduras, probablemente por cigarrillo, en el ombligo, la zona genital estaba alterada, había una fisura anal, muchos moretones en el cuerpo de un niño de 2 años y 4 meses”, detalló la profesional de la salud.
El informe forense precisó que la nena murió como consecuencia de un politraumatismo torácico y abdominal, por un golpe contundente que se produjo por medios crueles.
La doctora salió rápidamente de la Clínica de la Familia Hans Jurgen Fernando Dohmann, en Guaratiba, hasta la comisaría ubicada a unas cinco cuadras. Alertó a las autoridades sobre la situación.
Apresan a padre y madrastra
“Llegó sin aliento y describió todas las lesiones” de la pequeña, explicaron desde la policía. El papá y su pareja fueron detenidos poco después en el centro médico.
Marcos Vinicius Lino, padre de la niña, negó los ataques y afirmó que todo “es un error”. La madrastra, Patrícia André Ribeiro, insistió en que Quenia se lesionó al caer.
“En 40 años de profesión, este es el caso más terrible e inhumano que vi”, afirmó la comisaria Márcia Julião. “La niña estaba toda magullada. ¿Cómo alguien puede hacerle eso a un pequeño ser tan frágil e indefenso?”, se preguntó.
“Las lesiones demuestran que esta nena sufrió mucho antes de morir. Las torturas evolucionaron con el tiempo hasta causar la muerte”, sostuvo.
Marcos Vinicius Lino y Patricia André Ribeiro fueron acusados de homicidio doblemente calificado y torturas.
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El Pepazo/2001
