Desde que regresó de su lesión, Luka Doncic sigue subiendo la apuesta. Sin estridencias, pero tampoco con relax. Juega bien, sus Dallas Mavericks ganan y van consolidando un crecimiento más que interesante e importante dentro de la NBA. Visitaron Washington D.C. y fue un puro trámite (101-137) ante uno de los peores equipos que jamás han jugado en la NBA. Doncic asusta y castiga.
Los Wizards son, con todas las de la ley, el peor equipo de la NBA (2-18) como récord y siguen encadenando derrotas. Sumaron su 16ª seguida, siendo su última allá por el mes de octubre. Es la peor racha de la historia de la franquicia y una que podría terminar como uno de los equipos con peor récord de todos los tiempos.
Doncic y Dallas no tuvieron piedad. Ya desde el inicio marcaron diferencias (22-31 en el primer cuarto) y el partido se convirtió en un asedio constante. Hasta los 36 de diferencia, brillando un gran Kyrie Irving en anotación (25 puntos) y una efectividad destacada (10/16 TC). A su lado, la tradicional exhibición de Doncic.
El canterano del Real Madrid facturó 21 puntos, 10 rebotes y 10 asistencias. Triple-doble a lo que añadió dos robos y un tapón. En los últimos tres partidos encadena 11 robos y tapones, número que representa la valía defensiva. En ataque, por otro lado, no encuentra contestación y alcanzó el triple-doble 78 de su carrera deportiva en la NBA.
Es increíble estar con ellos en esas clasificaciones. Son unos compañeros increíbles
Esos 78 triples-dobles son el camino hacia algo histórico. Igualó los de Wilt Chamberlain y James Harden, y ya es el séptimo de todos los tiempos que tiene más. Persigue los 107 de Jason Kidd para seguir subiendo en la clasificación que domina con 200 Russell Westbrook e integró en su top-3 a Nikola Jokic con el 139. «Es increíble estar con ellos en esas clasificaciones. Son unos compañeros increíbles. Yo solo juego al baloncesto, no doy nada por hecho y es genial estar con ellos», explicó Doncic.
Es crecimiento. La progresión está ahí. La química está ahí
Y Dallas vive en racha. Con seis victorias consecutivas tienen la mejor racha de toda la NBA. Además, suman 10-1 en los últimos 11 partidos. Y lo que es más importante, solo están a dos triunfos del primer puesto del Oeste de los Thunder. «Es crecimiento. La progresión está ahí. La química está ahí. Todo crece en los partidos y mejoramos cada día», recalcó el pívot Daniel Gafford.
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El Pepazo/Marca
