Los robos, violaciones y secuestros contra los migrantes son comunes en el Darién. Los delincuentes usan armas de fuego o machetes
Con la llegada del presidente Raúl Mulino, las autoridades de Panamá se han propuesta hacer frente no solo a la migración ilegal que cruza la Selva del Darién, sino también buscan desarticular a las bandas criminales que allí operan diariamente.
El Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) informó que sus fuerzas especiales de la policía fronteriza panameña mataron a dos delincuentes que robaban a migrantes mientras cruzaban la densa selva del Darién. Hecho acaecido el pasado miércoles 11 de septiembre.
En el enfrentamiento, resultó muerto «un hombre con rasgos indígenas que portaba un rifle calibre 22 con cañón recortado». Casi en paralelo, las autoridades escucharon «voces de auxilio» por parte de migrantes que estaba siendo asaltados, por los que los efectivos acudieron al lugar efectuándose una segunda confrontación en la que murió otro delincuente que llevaba «una escopeta calibre 16».
Más de 244.200 migrantes cruzaron la selva del Darién en lo que va de 2024, una disminución de 110.056 en comparación con el mismo lapso del año pasado, lo que supone una caída del 31%, según cifras difundidas esta semana por el Gobierno panameño.
Las autoridades de Panamá estiman que en 2024 unos 320.000 migrantes atravesarán esta selva, una reducción del 38 % frente al récord histórico de 520.000 que cruzaron el año pasado, y que vinculan con las nuevas políticas de control de migración implementadas por el nuevo Ejecutivo, cuyo mandato comenzó el pasado 1 de julio.
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El Pepazo/2001/Con información de EFE.