El misógino, una trampa caza-bobos y la corrupción en la IV República

1.-Campaña femenina… En esta contienda electoral hay un aspecto muy particular: nuestras dignas mujeres se han puesto al frente de muchas concentraciones revolucionarias en las diferentes comunidades del país. Ellas, desde Chávez, juegan un rol protagónico en este proceso, pero tras el empoderamiento obtenido con el candidato ganador, Nicolás Maduro Moros, han redoblado las acciones. Quizás quieren demostrarle al candidato misógino de la oposición terrorista, que las mujeres son dignas madres trabajadoras y forjadoras del futuro de la patria. Son ellas las que llevan sobre sus hombros, el mayor peso de la crisis provocada por las medidas coercitivas unilaterales, que “Doña Violencia” y otros golpistas les pidieron a los gringos.

2.-Primero de Mayo… Esta vez, el Día de los Trabajadores en Venezuela, tuvo implícito un evento no menos importante: la sepultura de la candidatura de la oposición terrorista. Increíble. No sé de dónde salieron tantos chavistas, pero, evidentemente, en esa efeméride se demostró que somos mayoría en Venezuela, sin embargo, advierto, como he venido advirtiendo: no podemos pecar de triunfalistas, para ganar hay que votar. El 28 de julio debemos salir en cambote a darle el sufragio al candidato ganador, Nicolás Maduro, el único líder que trabaja por y para el pueblo.

3.- La maniobra de la “transición” … El desespero de “Doña Violencia» y su equipo de campaña, así como el de sus influencers y periodistas prepagos, es demasiado grande, más cuando ven a Nicolás Maduro lanzarse a la calle aclamado por las multitudes. En esas circunstancias, la señora y su misógino títere tratan de contrarrestarlo con falsedades como esa de la “transición”.

Plantean grandes discusiones en torno al caso, concluyen, incluso, que será una “transición” pacífica en la cual a los funcionarios del gobierno bolivariano se les respetará la vida, y tendrán un tratamiento justo de acuerdo con las leyes venezolanas. Mentiras, no habrá ninguna “transición”, todo eso es una vil maniobra, para hacer creer que tienen el triunfo asegurado. No van a ganar, están derrotados. Después del 28 de julio seguirá Maduro con su pueblo en el poder.

4.- El “mandato” de “Doña Violencia” … Decía el filósofo Miguel Angel Pérez Pirela, en uno de sus interesantes programas “Desde donde sea”, que “Doña Violencia” habla constantemente del “mandato” que le dio el pueblo en el fraude de las primarias, en la cual, posiblemente, obtendrían unos 600 mil votos.

Pero en caso de que sean 2 millones y medio como ellos dicen, tampoco representan la mayoría de los electores y electoras que sobrepasan los 21 millones en el país, por lo que la señora no tiene ningún “mandato” del pueblo. Esa es otra vil artimaña ante su evidente fracaso. Además, ella sabe que las elecciones no se ganan con fake news, ni con fotos ni videos trucados. Menos con la mentira de un supuesto “mandato” del pueblo que no posee.

5.- ¡Hasta cuándo mienten!… Estos golpistas de la oposición terrorista no se cansan de engañar a sus seguidores; montaron un show en la OEA presidida por la rata Luis Almagro, acusando al Gobierno revolucionario de crímenes de lesa humanidad. En Venezuela los responsables de esos abominables delitos son los bandidos que participaron en la “Operación Gedeón”, pretendiendo tomar el poder y asesinar a todos los chavistas; en el golpe de Estado de “Los Plátanos», los intentos de magnicidios, de invasión militar.

Son responsables de los crímenes de lesa humanidad los que exigieron y exigen el bloqueo de alimentos, medicinas, combustible, es decir,  Leopoldo López, Capriles Radonski, Juan Guaidó, Tomás Guanipa, Juan Pablo Guanipa, Lester Toledo, David Smolansky, “Doña Violencia”, Delsa Solórzano, Lilian Tintori, Carlos Vecchio, Iván Simonovis, Miguel Pizarro, Gilber Caro, entre muchos otros que incluyen a los que se ponen a llorar en la OEA, diciendo que su mayor tortura fue que no los dejaban ver a sus madres y a sus hijos, cuestión que no pensaron cuando tomaron las armas para ir a matar a las madres y a los hijos de otros. ¡Canallas!

6.-La corrupción en la IV República… He visto a muchos políticos, algunos jóvenes que no tienen ni idea de lo que fueron los gobiernos de Acción Democrática y Copei, y otros que se hacen los amnésicos, para atacar y llamar corrupto al Gobierno revolucionario.

En la IV República no ocurría eso, pero no porque no hubiese corrupción, sino porque, primero, era una caterva de bandidos que robaban y no permitían que sus apellidos fueran expuestos ante la opinión pública.

Segundo, porque los presidentes sólo eran títeres de los empresarios, quienes, aparte de tener el control del gobierno, eran dueños de los medios de comunicación social, de manera que no procedía ninguna noticia en contra de ellos, bajo ninguna circunstancia.

Tercero, en la IV República no existían las redes sociales. No corrían el riesgo de que en algún descuido un influencer o periodista delatara sus marramuncias.

Cuarto, existía una figura llamada partida secreta, que les permitía a los presidentes manejar el dinero a discreción. Con esa vagabundería acabó el presidente Chávez cuando llegó al poder. Nunca se supo la cantidad de dinero que utilizaban, mal gastaban o se robaban.

Pero sepan, amigas lectoras, amigos lectores, que la corrupción en la IV República era tan inmensa, que el presidente Carlos Andrés Pérez le regaló un barco a Bolivia sin tener puerto, por supuesto, eso no lo dicen los hampones de la oposición terrorista, y menos los adecos y los copeyanos insertos en la política.

Así que no vengan esos pseudodirigentes de la Venezuela de aquel entonces, algunos camuflados en otros partidos, a darse golpes de pecho. No olvidemos nunca que Chávez llegó al poder porque los adecos y los copeyanos saquearon el país. Pero nadie decía nada, hasta que Venezuela implosionó y la gente salió hambrienta a la calle en busca de comida.

Sin embargo, esos bandidos que fungían de políticos intachables, los calificaron de delincuentes, cuando los ladrones eran ellos. Los que tenían a Venezuela en cuatro bloques eran esos hampones, muchos de los cuales quieren regresar al poder el 28 de julio, apoyando a un candidato que no es candidato, y que pertenece a ese grupo arrodillado al imperio gringo.

7.-El misógino, una trampa caza-bobos… No solo hay que ser sino parecer. Y eso ocurre con el candidato de la oposición terrorista.

Es un sinvergüenza que simula ser un idiota, y los politiqueros aprovechan para venderlo como un hombre de paz.

Ejemplo, Eduardo Fernández, por citar un caso. «El Tigre», aferrado al aspecto del misógino, lo apoya sabiendo que es un perfecto granuja; quién puede creer que sea un hombre de paz alguien cómplice de «Doña Violencia».  Imposible.

Ese anciano misógino-con el permiso de los señores respetables de la tercera edad- tiene conocimiento de lo que representa esa señora, sabe que es una traidora de la patria que sólo quiere la presidencia, para entregarle el país a los gringos.

Sabe, además, que, en su afán de tomar al poder, ha participado en golpes de Estado, guarimbas, intentos de invasión militar y magnicidio, que respalda al presidente de Guyana, Irfaan Alí y a la Exxon Mobil, en la maniobra de despojar a Venezuela de nuestro territorio Esequibo.

Cómo se tiene respeto por un candidato que, pese a conocer todas las acciones delictivas de esa apátrida, en vez de pedir que le apliquen la ley, se preste para ser un candidato tapa, según el cual, en un supuesto negado ganara la presidencia, se la entrega a ella, para que la ceda al imperio norteamericano.

El misógino es una persona indigna, aborrecible, que por dinero participa en una jugada tan sucia, tan vil, como esa de entregarle a los más grandes genocidas del mundo, la patria de nuestras hijas e hijos, de nuestras nietas y nietos.