Manuel Paredes
Recientemente observé en diferentes chats la reacción en relación con las acciones del régimen en contra de los opositores de distinta naturaleza, así como la postura de varios personeros desprendidos del chavismo. Sin
embargo, hay un sector de la población que mantiene un resentimiento hacia dirigentes de la oposición y los que provienen del chavismo.
Estas reacciones van desde dudar que a algunos de ellos en verdad se le persigue como es el caso de Juan Pablo Guanipa, incluso llegan a plantear que es un montaje para hacerse popular, le cobran varios de ellos su posición de no haberse arrodillado ante la espuria Asamblea Nacional Constituyente y otros hasta se alegran de que se le persiga, tal es el grado de irracionalidad de resentimiento que coinciden con la narrativa del régimen que es mentira que se persigue a los dirigentes de la oposición.
El otro caso es del Juan Guaidò a quienes lo acusan de cobarde y de traidor y llegan hasta rreproducir hasta la saciedad cuando fue insultados en los Estados Unidos por simpatizantes del chavismo en una universidad norteamericana otro ejemplo lo constituyen aquellos dirigentes que provenientes del chavismo hoy militan en la oposición o coinciden con la necesidad de exigir las actas del 28 de Julio, los cuales muchos prefieren que no apoyen la lucha por el respeto a la voluntad popular y la proclamación de Edmundo González Urrutia como
ganador de la elección presidencial.
A la vez, está la postura, no se sabe si por ignorancia o con la intención franca de favorecer al régimen, al manifestar que este es un gobierno socialista, lo que le permite al régimen levantar banderas de justicia social cuando aplica un paquete neoliberal expresado en la eliminación del salario, las pensiones, la aplicación del instructivo ONAPRE que vulnera los convenios colectivos de los trabajadores de la Administración pública.
Lo cierto es que sectores de Fedecamaras como Jorge Botti y Jorge Roig han coincidido plenamente con el régimen en que no se produzca aumento de salarios y pensiones, también han acompañado al régimen en la ronda de negociaciones internacionalmente en el sector petrolero. Como el capital defiende sus intereses Horacio Velutini, presidente de la Bolsa de Valores de Caracas, manifestó, sin ambages, que la oposición no garantizaba estabilidad y que se oponía a mas sanciones, por lo que era preferible, se desprende, que Maduro si garantiza esa estabilidad para los empresarios. He allí el “socialismo” que muchos ven en el régimen.
De igual manera, muchos desean que el no reconocimiento que en estos momentos `plantean AMLO, Petro y Lula hacia Maduro se transforme en un apoyo al régimen, porque no “ son sinceros” al no apoyar el triunfo de EGU cuando tampoco los 27 países de la Union Euiopea han reconocido a Edmundo González Urrutia como presidente electo, pero todos coinciden en el dictamen del TSJ no es valido y que se presenten las actas.
Por ello, cuando se produce el resentimiento, muchas veces el mismo raya en lo irracional, que contraria la racionalidad, la cual se identifica sobre todo con la lógica y con el conocimiento científico. Sería, pues, en la ciencia (en un sentido amplio) en donde por excelencia encarnaría la racionalidad humana. Así, puesto que lo irracional sería precisamente aquello que no se somete a los cánones de la racionalidad, dado los principios de la ciencia y los métodos que en ella se emplean. Lo irracional queda entonces de entrada concebido como
algo que emana ante todo de la ignorancia y de la ilogicidad.
Cuando se hace referencia a la ignorancia no indica la falta de estudios, sino el desconocimiento de las leyes la ciencia y sus métodos de análisis. Se cae en lo subjetivo y en los intereses de clase, de grupo que obvian lo razón para adentrarse en su visión sesgada. Asi resulto cuando se quemaron en la hoguera a quienes proclamaran que la tierra era redonda que fue resultado de sus estudios científicos, pero ese conocimiento enfrentaba la creencia de la escolástica y del dogma. De igual manera la creencia de la superioridad de la raza aria de los alemanes que llevo a la quema de los judíos en los campos de concentración.
Pero frente a esa resentimiento y la irracionalidad la verdad busca imponerse y muchas veces lo logra como lo fue el renacimiento y la modernidad que destruyo la escolástica, la inquisición.
De igual manera la caída del fascismo alemán y sus aliados y la destrucción del mito de la superioridad de la raza aria. Después de la segunda guerra mundial Y hoy también se impondrá la verdad de lo que realmente ocurre en Venezuela y la necesidad de la unidad de todos los sectores, derrotando el sectarismo y la exclusión asi como el resentimiento de quienes no entienden la necesidad de avanzar juntos hacia la construcción de una Venezuela democrática.
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