Un comprador de lotería en Tennessee, EEUU, vivió un momento de película, pues estuvo a punto de perder su premio de $1 millón de dólares a manos de un empleado, quien le robó el boleto.

El comprador compró dos boletos de lotería en una estación de servicio en Murfreesboro. Uno de los boletos resultó ser un ganador de $40, mientras que el otro tenía un premio de $1 millón.

El comprador, cuya identidad no se dio a conocer, raspó el código de barras frontal de los boletos y pidió al empleado de la tienda, identificado como Meet Patel, de 23 años, que verificara si eran ganadores, como es común. En ese momento, el hábil trabajador se dio cuenta de que uno de los boletos era el ganador de $1 millón.

“Lo tiró encima de la basura y cuando el cliente se fue, lo sacó de la basura ante la cámara y lo guardó en su bolsillo”, declaró el detective Steve Craig a los medios locales.

Instantes más tarde, cuando Patel intentó reclamar el premio en efectivo, su plan se desplomó luego de que los funcionarios de la lotería, que examinan a todos los grandes ganadores, descubrieran el plan fraudulento de Patel. La grabación de seguridad demostró que el boleto había sido robado.