Kintun wingkulche
Mapuche, comunista
Harry Houdini fue el gran ilusionista y muchos otros como él, muestran a través de su arte una realidad que no es verdadera. Semeja a la famosa caverna de Platón. Vemos sombras que pensamos son reales, pero no lo son, meras imágenes distorsionadas de lo que es la realidad se cruzan con nuestra mirada.
Desde aquella época en que Joseph Goebbels decía: Miente, miente, miente que algo quedará, cuanto más grande sea una mentira más gente la creerá. Mucho antes incluso, Marx en el 18 Brumario nos muestra que quienes detentan el poder se las ingenian para engañar a quienes dominan. Y en el Manifiesto Comunista, junto a Engels describen de manera muy clara, las diversas maneras de las cuales se valen los capitalistas para engañar a los trabajadores. En todas estas artimañas los medios de comunicación juegan un papel fundamental.
Ya en 1815, Napoleón explicó sin tapujos el sueño que tenían todos los gobernadores, se convirtió en la voz de todos ellos que no se atrevían a confesar: La libertad de prensa debe estar en manos del gobierno, la prensa debe ser un poderoso auxiliar para hacer llegar a todos los rincones del Imperio, las sanas doctrinas y los buenos principios. Abandonarla a sí misma es dormirse junto al peligro.
Este arte se ha desarrollado cada vez más, amparado por las nuevas tecnologías. Se usan algoritmos para entregar solo algún tipo de información. En las redes sociales un conjunto de normas de programación, las cuales, hacen que una publicación se muestre mucho y a la vez, otras casi no se muestran a ningún usuario. Filtran buena parte de los contenidos que consumimos, combinando nuestros datos personales y comportamientos digitales. Así nos encauzan hacia donde les conviene, por ejemplo, nos hablan de economía verde.
El Programa de la ONU para el Medio Ambiente (PNUMA) ha definido Economía Verde como: aquella economía que resulta en un mejor bienestar humano y equidad social, reduciendo significativamente los riesgos ambientales y las escaseces ecológicas. Marianne Fay, economista jefe del área de desarrollo sostenible del Banco Mundial, explica los desafíos y oportunidades, de los países de América Latina frente al crecimiento verde: Es un
crecimiento sustentable desde el punto de vista del medio ambiente.
Consta de tres características principales: es eficiente en términos de costos, es limpio al minimizar la contaminación y es resiliente al apreciar el rol del capital natural en la prevención de los desastres naturales. Allí todo parece bien, sin embargo, no dicen que orientan a los países latinoamericanos desde el Banco Mundial, apoyando con un análisis técnico junto a los gobiernos, para potenciar las ventajas comparativas con las que cuenta el país, lo que busca aumentar la calidad de lo que allí se produce. Es decir, los encajonan solo a ser productores de materias primas y turismo. Les quitan la posibilidad de desarrollar grandes industrias Lo mismo ocurre con los desarrollos sustentables. Los países imperialistas como Estados Unidos, China o Rusia y también la Unión Europea. Desarrollaron grandes industrias y hoy vienen a Latinoamérica para obtener las materias primas a bajo costo. Tal cual lo hacían los países otrora colonizadores.
Todo esto produce violencia, rabia y desesperación ahogada en gritos no expresados. Violencia, de los pueblos que a través de leyes especiales que rigen las zonas económicas especiales, ven mermados sus salarios y todo tipo de derechos laborales y otros derechos humanos.
A propósito de los colonizadores, en 1961, Jean Paul Sartre dijo: la colonización o descolonización, son simplemente una relación de fuerzas. El explotado percibe que su liberación exige todos los medios y en primer lugar la fuerza. (…) el colonialismo es una violencia en estado de naturaleza y no cederá sino ante una violencia mayor. Entonces la burguesía colonialista al sentirse en peligro, introduce una nueva noción: la No VIOLENCIA.
Quizás muchos de ustedes no sabían que Francia el país de la Revolución burguesa y precursora de los derechos humanos, se anexó a Túnez con la venia de Alemania y el Reino Unido, dejando a Italia fuera del juego. Y en 1831 se anexó a Argelia con el pretexto de una gran cantidad de piratería que los afectaba. Aun cuando en la segunda guerra mundial, los argelinos lucharon y ayudaron a la liberación de Francia de los Alemanes, eran tratados en
forma despectiva por los franceses.
En la primavera de 1945, los argelinos exigían la independencia. El 8 de mayo de 1945, se produjo la gran matanza de Setif, en donde se cometieron brutales desmanes y que duró ocho días, tras las manifestaciones nacionalistas que se habían producido ese día en la región de Constantina. La represión, desproporcionada, causó miles de muertos y acabó con aldeas enteras.
A principio de la década de los 60 los argelinos ya hablaban abiertamente de independencia. Fue el 17 de octubre de 1961, cuando 30.000 argelinos salieron a las calles de París, para protestar pacíficamente contra un toque de queda impuesto solo los argelinos que vivían en la ciudad. reclamando la independencia casi siete años después del inicio de la guerra contra el dominio francés en el norte de África.
La respuesta de la policía fue asesinar a cientos de manifestantes y decenas de otros fueron arrojados al río Sena, lo que convierte este hecho en una de las páginas más oscuras de la historia colonial de Francia. El gobierno de turno censuró la noticia, destruyó muchos de los archivos e impidió que los periodistas investigaran la historia.
Los boletines de noticias contemporáneos reportaron tres muertes, entre las cuales encontraba un ciudadano francés. Los hechos no fueron cubiertos por la prensa internacional. Brigitte Laîné, curadora de los archivos parisinos, afirmó en 1999 que algunos documentos oficiales que revelaban el alcance de los asesinatos.
Ese día murieron entre 200 y 300 argelinos. Un total de 110 cadáveres fueron arrastrados a las orillas del río Sena durante las semanas siguientes. Algunos fueron asesinados y luego tirados al río, mientras que otros que resultaron heridos, fueron arrojados a las frías aguas y abandonados para que se ahogaran.
Ustedes se pueden percatar entonces, que el sistema crea siempre una ilusión para hacer creer que la realidad no es la que vemos, sino otra. Así nos venden la idea de que los derechos humanos son imparciales, no contaminados con ideología ninguna. Para que esto se vea bien, se prohíbe a los defensores de DDHH militar en partidos políticos que critiquen al sistema. Su función al igual que otras instituciones, es mantener el orden, ante la violencia que puede desencadenarse desde los dominados que aspiran a otra forma de vida, una vida libre, ya no más esclavos del capital. Hablan de la No Violencia, pero su comportamiento es todo lo
contrario cuando sus intereses de clase se ven afectados.
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