El veterano púgli criollo, que a sus 40 años se convirtió en campeón interino superligero al noquear al norteamericano Ohara Davies, exige ahora la revancha contra al campeón de la «Faja regalada» Rolando «Rolly» Romero. La AMB tiene la palabra
Orlando Bohórquez Parra
Corresponsal Chile
Luego de su contundente triunfo por nocaut, ante el peligroso ingles Ohara Davies, el longevo venezolano Ismael Barroso, quiere enfrentar de nuevo al campeón de la «Faja regalada» Rolando «Rolly» Romero, pero con la condición de que el árbitro sea cualquiera, menos Tony Weeks, quien descaradamente lo privó de ser actualmente el campeón mundial indiscutible welter Junior, versión AMB.
Barroso, quien a pesar de sus cuarenta años de edad, luce como un atleta mucho más joven, por ser disciplinado en sus entrenamientos y vida privada, sorprendió de nuevo al mundo boxistico, al ser implacable contra el ingles Ohara, despachando lo en el mismo primer round.
Con esta demostración, la Asociación Mundial de Boxeo, no tendrá más opción que ordenar de inmediato una revancha entre el venezolano y el cubano estadounidense Rolly Romero, quien ya «perdió» con Ismael, pero que gracias a Tony Weeks, le regalaron esa corona AMB que hoy ostenta.
Al finalizar su pelea del pasado sábado, en una de sus primeras palabras, Ismael Barroso, dijo, que pide le concedan su legítima oportunidad de ir contra Rolly, para demostrar que le volverá a ganar, pero que coloquen un árbitro imparcial. En la gráfica, cuando golpeaba al cubano Rolly, en la pelea que le quitaron descaradamente, sin que las autoridades del boxeo hicieran justicia.
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