Nikola Jokic es un salvaje: 42 puntos destrozan a Washington… y encadena 25 partidos nunca antes vistos. El último MVP de las finales de la NBA promedia la mayor eficiencia en el tiro en la historia durante un periodo de 25 partidos
Nikola Jokic sigue sumando actuaciones extraordinarias. El gigante de Sombor demostró que puede ganar, con el anillo de 2023 de sus Denver Nuggets ante los Miami Heat como exponente, y validó su ‘estilo’ único, como ese pívot con alma de base en el inicio de todo. Todo lo demás que consigue es la constatación de su condición diferencial, de un juego que no tiene nada que envidiar a nadie. Vuelve a liderar a los campeones rumbo a todo y una última salvajada da la vuelta al mundo: 42 puntos (15/20 en TC y 12/14 en tiros libres), 12 rebotes, 8 asistencias y ningún balón perdido para dinamitar a los Washington Wizards (104-113). Al descanso llevaba 26, más que todos los titulares juntos de su rival.
No es una actuación más, son números totalmente «ridículos» o «imposibles». Y no es la primera vez. En los últimos 25 partidos tiene unos registros que nadie más en la NBA ha podido hacer. En la historia. 25,4 puntos por noche, 10,9 rebotes, 8,8 asistencias, 1,3 tapones, un robo y unos parámetros en el tiro de locura: 74,9% en TC, 57,1% en el triple, 85,5% en tiros libres… y la mayor eficiencia vista: 79,8 en el ‘true shooting’, un guarismo que indica cuánto funcionan los tiros sumando todo tipo de lanzamientos.
¿De verdad hay algún jugador mejor?
No sé qué buscas si no te gusta Jokic
Michael Malone
Con Jokic se abre un debate que, curiosamente o no, solo aparece en temporada regular, porque en Playoffs se encargó de hacer desaparecer. ¿Es el mejor jugador del mundo? Aparecen otros nombres, siendo el de Joel Embiid el más repetido. «Si no te gusta Jokic, no sé qué buscas en la vida», dijo Michael Malone, su técnico. Es el primero que alucina, más con una galáctica actuación como la de Washington, en un decente partido de los Wizards.
«Es la primera vez en mi carrera en la que me dedico a esperar a ver cómo tratan de pararle», agregó. Tanto era el nivel de Jokic, que esa es la explicación de su entrenador. Un martilleo constante de la zona, capaz de encontrar compañeros y sumar otro triunfo de los Nuggets. Suman 30, con 14 derrotas. En la tercera posición del Oeste, pero cerca de todos los favoritos.
Alivio en los Lakers
Los Ángeles Lakers respiran aliviados con un buen triunfo ante los Portland Trail Blazers (134-110). Por rotundidad, al dominar todo el choque celebrado en el Crypto.com Arena sin permitir que un equipo inferior se metiese en la batalla. Y en términos clasificatorios, al alcanzar 22 triunfos y tener dos sobre el 11º -no juega play-in-, engancharse al carro de la pelea por el sexto y, por ejemplo, dejar a cuatro encuentros de los Golden State Warriors.
De’Angelo Russell repitió como líder del equipo gracias a 34 puntos y 8 asistencias. Vive un momento dulce, 27,2 puntos de media en los últimos cinco partidos y si encuentra consistencia -especialmente en el lanzamiento- es un gran arma para los Lakers de LeBron James (inspirado, 28 puntos) y el relajado (14+14) Anthony Davis.
Boston, la apisonadora
Los Boston Celtics son, no cabe duda, el mejor equipo de baloncesto del mundo. No pierden dos partidos seguidos desde el 8 de noviembre y tras ceder su enorme racha en casa ‘sacaron’ un gran triunfo en la cancha de los Houston Rockets (116-107), una de las pistas más difíciles para cualquier equipo visitante… más al cruzarse el país.
Todo se resumió en Kristaps Porzingis, el más destacado: 32 puntos (55% en TC y 6/11 en triples), 5 rebotes y 5 tapones y 18 puntos de ventaja si el letón pisaba pista. Su curso es enorme, recordando a sus mejores momentos y perfectamente entonado en una máquina que venía muy engrasada.
Siakam todavía no funciona en Indiana
Los Suns aceleraron con 40 puntazos de Durant e impidieron que los Pacers llegasen a tiempo. Siakam, sin brillo y seguramente esperando el regreso de Tyrese Haliburton. Aunque muy emocionado: «Han sido días locos. Es emocionante ver el talento, el nivel aquí y su ritmo de juego. Solo quiero salir y jugar con estos tipos», abrochó. Le queda tiempo para cambiar las cosas, por eso es uno de los mejores de la NBA.
El Pepazo/Marca