Austin Reaves (32 puntos y 7/10 tripes) obra lo imposible en el inexpugnable TD Garden
Los milagros, de vez en cuando, existen en la vida… y también en la NBA. Como si de un cuento de Navidad se tratase, pero con un mes de retardo, los Lakers se impusieron a los Celtics (105-114) en un TD Garden que hasta ahora había sido casi inexpugnable para todos sus rivales, y lo hicieron (ahí está el milagro) sin sus dos estrellas, LeBron James y Anthony Davis. ¡Ver para creer!
LeBron fue descartado debido a una lesión en el tobillo izquierdo y Davis por unas molestias en el tendón de Aquiles y espasmos en la cadera izquierda, un bajonazo para la TV nacional de EE.UU, que emitió en directo el partido entre los dos equipos más laureados de la NBA, pero no para unos Lakers que llegaban hechos unos zorros (5 derrotas en sus últimos 9 partidos dejando muy malas sensaciones) y que resucitaron en el lugar más insospechado de forma épica.
Los Lakers cimentaron la machada con una gran defensa (habían encajado una media de 127 puntos en los últios cinco partidos y dejaron a los Celtics en 105, provocándoles además 15 pérdidas de balón), y un ataque demoledor, con 19/36 triples y 13 de ellos en la primera parte para encarrilar la victoria (46-60). En el tercer cuarto Boston reaccionó con un parcial de 12-2 tras cuatro triples seguidos (77-71), pero a los Lakers no les temblaron las piernas.
Austn Reeves hizo suyo el discurso de ‘King’ James
La tercera pata del milagro angelino fue la formidable actuación de Austin Reaves, que tiró del carro atendiendo los mensaje de LeBron de los últimos días, en los que suplicaba a sus compañeros la necesidad de que diesen un paso adelante. Reaves hizo suyo el discurso del ‘Rey’ y dio tres o más en su mejor partido de la temporada.
Todos somos jugadores talentosos. Y esta fue una oportunidad para mostrarle al mundo lo que se puede hacer. Antes del partido nos reunimos y pensamos: ‘Mira, lo mínimo que podemos hacer es salir y jugar tan duro como podamos
Austin Reaves (Jugador de los Lakers)
Reaves reivindicó el papel de los secundarios de los Lakers, en el punto de mira negativo toda la campaña: «Todos somos jugadores talentosos. Y esta fue una oportunidad para mostrarle al mundo lo que se puede hacer», dijo. «Antes del partido nos reunimos y pensamos: ‘Mira, lo mínimo que podemos hacer es salir y jugar tan duro como podamos y vivir con los resultados'».
El borrón más doloroso para los Celtics esta temporada
Los Celtics siguen siendo líderes de la NBA (37-12), pero protagonizaron su peor borrón de la temporada ante el rival más inesperado e indeseado. Habían arrancado la temporada ganando 20 partidos seguidos en el TD Garden, pero parecen haber perdido la magia de su cancha con tres derrotas en los últimos 5 encuentros. Los 19.156 espectadores que abarrotaron el recinto enmudecieron viendo como su eterno rival, en cuadro, les mojaba la oreja.
La aportación de Jayson Tatum (23+7+3), Kristaps Porzingis (17+7+3+5 tapones) y Sam Hauser (17 puntos con 5/9 triples) en 23 minutos, resultó insuficiente. Lo más que lograron acercarse de su enemigo fue a siete puntos. Tan imposible lo vieron que en el último cuarto Tatum sólo jugo cinco minutos.
Solo pasa. Suceden rachas de mal baloncesto. No podemos sentarnos aquí y actuar como si no tuviéramos demasiado derecho a que nos pasaran a nosotros. Suceden
Joe Mazulla (Entrenador de los Celtics)
Jaylen Brown, su peor partido en el peor momento
No se pueden centrar todas las culpas de la derrota de los Celtics en él, pero Jaylen Brown, una de las estrellas de Boston, perpetró su peor partido de la temporada con 8 puntos (4/9 t2 y 0/3 t3), 8 rebotes y 7 asistencias. Su equipo echó de menos su aportación habitual (venía promediando 22.6 puntos, 5,4 rebotes y 3,7 asistencias), pero como casi todos sus compañeros, tuvo una noche para olvidar.
- Boston Cetics-Los Angeles Lakers 105-114
- New York Knicks-Indiana Pacers 109-105
- Memphis Grizzlies-Cleveland Cavaliers 101-108
- Utah Jazz-Philadelphia 76ers 124-127
El Pepazo/Marca