Los Lakers, sin duda condicionados por su ilustre padre, seleccionaron a Bronny en el puesto 55 del draft para tener contento y convencer así a su jugador franquicia para que ampliase su contrato, cosa que lograron el 2 de julio cuando ‘King’ James rubricó su firma por dos temporadas y 102,47 millones, el máximo posible dentro del convenio.

Aluvión de críticas a Bronny

Era el segundo y definitivo paso para que la estrella de los Lakers pudiese cumplir el sueño de su vida, poder jugar junto a su hijo. Desde ese momento todos los focos se posaron sobre su primogénito, que fue seguido con lupa durante la Liga de Verano de Las Vegas, en la que dejó más sombras que luces, recibiendo además un aluvión de críticas de algunos analistas que no le consideran apto para jugar en la NBA.

LeBron ya salió en defensa de su hijo cuando las críticas arreciaron contra él durante la Liga de Verano: «No sé si la gente realmente entiende a Bronny. A él no le importa. A mí sí me importa un poco. Cuando yo llegué [como novato], quería agradarle a la gente, y algunas de las cosas que la gente decía sobre mí me molestaron al principio de mi carrera… A él no le importa una mierda».

Y ahora, cuando las críticas parecían haber cesado momentáneamente, LeBron acaba de colgar una story en su instagram en la que anima a su hijo a rebelarse contra las críticas y a seguir peleando: «Sigue así chico, que se joda todo el odio y el ruido», escribió James acompañando su agresivo mensaje con un vídeo de 13 segundos aderezado con música inspiradora en el que se ve a su hijo Bronny entrenándose en solitario con un entrenador personal mientras lanza a canasta sin fallar ninguno de los cuatro tiros que hace desde distintos sitios del perímetro. «¡Conoces a tu leyenda personal! ¡Ellos no te conocen!», subrayaba en la parte inferior del vídeo.

Sin duda tengo una cantidad de presión amplificada. He estado lidiando con cosas como esta durante toda mi vida, así que no es nada diferente

Bronny James (Jugador de los Lakers)

En su presentación como nuevo jugador de los Lakers, donde compareció junto al nuevo entrenador, J.J. Redick, asumió que llega a la NBA con una presión extra a la del resto de novatos: «Sin duda es una cantidad de presión amplificada. Ya lo he visto en las redes sociales y esas cosas. He estado lidiando con cosas como esta durante toda mi vida, así que no es nada diferente».