La mujer expresó que ha dado a luz cinco veces desde que empezó a alquilar su vientre. Esto le ha permitido percibir ingresos estables en ese país. Es lo que se conoce como la maternidad subrogada.

Por Jackelin D.

En Colombia, la Corte Constitucional solicitó esta semana al Congreso que se regule la maternidad subrogada o también conocida como la práctica del alquiler de vientres.

La Corte considera que es imperioso regular esta forma de reproducción asistida y evitar la “mediación lucrativa” de las personas que se ofrecen a involucrarse en estos procedimientos.

Este pronunciamiento ha generado varias opiniones en cuanto este tema. Uno de los puntos de debate más frecuentes es el aumento de casos de “turismo reproductivo” y las mujeres que deciden ofrecer su vientre para sobrevivir y generar ingresos estables en Colombia.

Este es el caso de Patricia*, quien decidió mantener su nombre bajo anonimato. El medio Noticias RCN reseñó que la mujer venezolana ha prestado cinco veces su vientre para sacar adelante a su familia en Colombia.

Patricia, quien es enfermera pediatra de profesión, conoció lo que significaba la maternidad subrogada cuando trabajó en una clínica de fertilidad. La mujer detalla que en las cinco veces que salió embarazada los padres biológicos le han prestado apoyo a ella y a sus dos hijos. Los ingresos le han permitido costear algunos gastos siendo una migrante venezolana. En cuanto al pago, mencionó que puede percibir entre 1.000 a 10.000 dólares por todo el proceso.

Al principio siempre me han dado 1.000 o 2.000 dólares. Luego del parto me han entregado hasta 1.000 dólares. Durante el proceso me ayudaron con mis hijos, me regalaron el mercado porque es un año y medio en el que estoy comprometida con el proceso. No puedo trabajar, no puedo tener relaciones sexuales, no puedo estar con otras personas, no puedo limpiar, salir a hacer mercado”, explicó.

¿Cómo ocurre la maternidad subrogada?

Alquiler de vientre — Cortesía diario La Razón

La abogada penalista Helena Hernández explicó que la maternidad subrogada funciona en dos casos.

La primera es cuando la mujer gesta y da a la luz a un bebé con material genético que aportan otras personas. La segunda es cuando la mujer aporta el óvulo mediante el proceso de fecundación in vitro.

Hernández considera que en Colombia existe un vacío normativo sobre la materia que puede dar pie al “lucramiento” o “engaños” de terceros durante el proceso de esta práctica.

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Estos procedimientos no se encuentran regulados, pero tampoco están prohibidos expresamente. Sin embargo, la Corte Constitucional desde el año 2009 abrió la puerta a la viabilidad de un tipo de contrato, señalando la necesidad de una regulación exhaustiva y de cumplimiento de ciertos requisitos”, mencionó para RTV Noticias.

Alquiler de vientres en otros países

En países como España, esta práctica es penalizada con cárcel. La norma indica que estos procedimientos, según la legislación vigente, atenta con “la mujer, su dignidad y promueve la mercantilización de su cuerpo”.

En Canadá, en cambio, esta decisión es legal bajo condiciones específicas que evitan que se convierta en una práctica lucrativa y con el fin de ayudar primordialmente a las familias que, por diversos problemas, no pueden concebir un hijo.

La Fiscalía colombiana actualmente pide regular la maternidad subrogada y la compensación económica que se recibe, además de la responsabilidad en caso de riesgos físicos o psicológicos para las mujeres y los casos de bebés con malformaciones.

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El Pepazo/eldiario