Gian Carlo Di Martino
Postrecitos de Huevos Chimbos
1.- Nicolás Maduro Moros, “El Gigante” de la diplomacia bolivariana… En nuestro máximo líder de la revolución están los resultados de haber sido siete años canciller del Comandante Eterno. Solo la gente llena de odio, de resentimiento, de frustraciones, no reconoce la gestión que Maduro hace para enfrentar esa guerra bestial que le declararon los gringos, con el apoyo de los terroristas venezolanos, muy superior, mucho más agresiva que la que esos golpistas asesinos emprendieron contra Hugo Chávez.
De pie, junto al pueblo, el presidente Nicolás Maduro nunca ha dejado de hacer gala de la diplomacia bolivariana de la paz, del diálogo, de la cooperación, de la solidaridad, apostando porque todos los países del mundo tengan derecho a tratarse bien y llevar buenas relaciones. Siempre ha demostrado que es un “Gigante” de la diplomacia bolivariana y lo ratificó finalizando el 2023 con los Acuerdos de Barbados, la Reunión de Argyles y la liberación de Alex Saab, vilmente secuestrado y torturado por los genocidas del norte.
2.- Revolución femenina… He allí la diferencia. Mientras la oposición terrorista busca la forma de dar un golpe de estado, o cómo aumentar el sufrimiento del pueblo, el presidente Nicolás Maduro se ingenia alternativas tendentes a superar la crisis, de allí la creación de la Gran Misión Venezuela Mujer. Hasta diciembre, se habían inscrito 4 millones 500 mil en el Sistema Patria, mecanismo que les brinda la posibilidad de registrarse en algunos de los vértices planteados de emprendimiento, educación, salud, servicios sociales. ¡Enhorabuena!
3.- Los bonos del Sistema Patria… Los forajidos que integran las bandas Voluntad Popular, Vente Venezuela, Primero Justicia, Un Nuevo Tiempo y la Acción Democrática de Henry Ramos Allup, se burlan de las ayudas en bolívares que el Gobierno bolivariano, a través de este método, entrega al pueblo, porque a ellos no les hace falta, se han hecho millonarios con el negocio de los golpes de estado contra nuestro país. La mayoría viven como reyes en el exterior.
Pero estoy seguro que así no piensa una madre o un padre de familia que tiene dificultades para comprar, por ejemplo, un paquete de harina precocida, por esa crisis que esos mismos terroristas generaron intentando derrocar al presidente Nicolás Maduro. Sabemos que es poco, pero a esa precariedad llevaron los conspiradores la economía venezolana.
4.- La hipocresía de las ONG… Es mentira que estas organizaciones –me refiero a las delincuenciales- aplauden la libertad de los conspiradores presos. Eso es lo que pretenden hacer creer con sus falsas declaraciones, pero la realidad es que no quisieran que ningún reo quedara libre, porque en la medida que eso ocurre, en esa medida se les acaba el millonario negocio. Se han forrado de dólares con la detención de criminales que participan en los golpes de estado y en cualquier acción desestabilizadora en contra de Nicolás Maduro, cuestión que implica a los gringos y, por consiguiente, millones sobre millones del billete verde.
5.- La migración venezolana… Los influencers y periodistas prepagos, que en Venezuela y desde el exterior nos atacan por celebrar que Alex Saab pasara las Navidades con su esposa Camila y sus hijos, cuando hay miles de compatriotas padeciendo necesidades fuera de nuestro país, pretenden quitarle de encima la responsabilidad del caso a la oposición terrorista.
Intentan que la gente olvide la campaña mediática enfocada en que los venezolanos y venezolanas abandonaran el país, llevada a cabo por delincuentes como Juan Guaidó, Leopoldo López, Julio Borges, Antonio Ledezma, Lester Toledo, David Smolansky, Freddy Guevara, Juan Pablo Guanipa, Tomás Guanipa, Juan Requesens, entre otros hampones, mientras que el Gobierno bolivariano por el contrario creó la Misión Vuelta a la Patria para traerlos de regreso.
6.- La mesa de Argyle… Nosotros en Venezuela, con la oposición terrorista, en eso de boicotear acuerdos tenemos un doctorado. Desde que el presidente Nicolás Maduro asumió el poder y comenzó a llamar al diálogo, los adversarios están saboteando los encuentros.
Hay un caso emblemático en Santo Domingo, donde se organizó una mesa de negociación y cuando estaba todo listo para estampar las rúbricas, el infanticida Julio Borges recibió una llamada de los gringos y lleno de miedo se negó a firmar… Nada que huela a paz es fácil con los genocidas del norte haciendo daño y sembrando cizaña.
Por consiguiente, no extraña la actitud del presidente de Guyana, Irfaan Ali, quien avaló y justificó la llegada de un buque de guerra británico a las aguas no delimitadas del Esequibo, acción que tuvo una respuesta efectiva por parte del presidente Nicolás Maduro, al ordenarle a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana unos ejercicios conjuntos de defensa militar en nuestro territorio.
7.- 2023 signado por el éxito de la unión patriota… El pueblo de Venezuela siempre ha estado a la vanguardia de cualquier situación en el país, por muy adversa y difícil que sea. Y el año que acaba de concluir no fue la excepción. Si me permiten en política una expresión deportiva, debo decir que culminamos el 2023 como nuestra Reina Morena, Yulimar Rojas: en la gloria.
Sé que estamos en crisis, que tenemos muchas dificultades, pero eso no impide observar que despidiendo el 2023 se registraron cuatro eventos en los que la revolución cerró a la altura de los saltos de nuestra monumental campeona: los Acuerdos de Barbados, el referendo del Esequibo, la libertad de Alex Saab y la resolución del caso de “Canserbero”. Y es digno destacar que, en el éxito de estos eventos, de alguna u otra manera, jugó un papel preponderante la unión y el nacionalismo del pueblo bolivariano y patriota.
Los Acuerdos de Barbados se dieron tras los insistentes llamados al diálogo por parte del presidente Nicolás Maduro, junto a un pueblo unido que reclamaba soluciones a la crisis, sin embargo, la oposición terrorista pateaba la mesa de negociaciones, hasta que finalmente se impuso el máximo líder de la revolución bolivariana.
El referendo recibió las más grandes descalificaciones por parte de la oposición violenta, que, apoyados en sus influencers y periodistas prepagos, decían que era algo inútil, sin fundamento jurídico.
Para los grupos hamponiles Voluntad Popular, Vente Venezuela y Primero Justicia, que se pasaron al bando de los que pretenden robarnos nuestro Esequibo, era igual que el presidente Nicolás Maduro llegara a San Vicente y Las Granadinas, solo, íngrimo, que con el respaldo de 10,5 millones de venezolanos y venezolanas que votaron por el SI.
Algo similar ocurrió con el secuestro de nuestro diplomático, por parte de los genocidas del imperio norteamericano. En este caso se contó con el apoyo del Gobierno revolucionario y el movimiento internacional Free Alex Saab, pero a ellos se sumó todo el pueblo de Bolívar.
Salvo los terroristas, los venezolanos y venezolanas clamaban por la liberación de Saab, que regresara junto a su familia, más cuando se sabía que se trataba de un preso político. De un hombre inocente torturado y humillado por unos genocidas que se creen dueños del mundo.
No sé cuántas personas estarían de acuerdo con que la Fiscalía del Ministerio Público reabriera el expediente del rapero Tirone José González, mejor conocido como “Canserbero”, pero de lo que no me cabe la menor duda es que la resolución de ese asesinato, lo celebraron de corazón todos los venezolanos y venezolanas, principalmente los jóvenes de nuestro país.
Incluso, el caso de Canserbero, como el de Alex Saab, fue elogiado desde otros países. En ambos se hizo justicia. Y los aplausos se escucharon a rabiar. De cualquier forma, es de resaltar que en esos eventos de alguna manera es de resaltar que el pueblo tuvo una marcada presencia, y ese es el rumbo. Unión y más unión: pueblo, FANB, Gobierno. Solamente los enemigos nos quieren divididos.
8.- Lo que la oposición terrorista debe aprender de Alex Saab… Sé que esto es una utopía, algo así como soñar despierto, una quimera, una ilusión, una idea fascinante que en estos primeros días de 2024 me ocupa la mente. Pienso que, si los adversarios entendieran el papel de una verdadera oposición, quizás la historia de Venezuela hoy en día sería otra. Cuánta sangre, muertos, hambre, miseria, se hubiesen evitado.
Pero la oposición terrorista venezolana siguiendo el guion gringo no lo entendió, siempre intentó llegar al poder tomando los atajos de la violencia, de la agresión, sin tomar en cuenta que las consecuencias de todas esas acciones las padecería el pueblo, como las está sufriendo.
Para colmo, entre esos guarimberos, hay un grupo de idiotas, como los periodistas prepagos y los influencers, al servicio del golpe de estado contra Venezuela, que se han dedicado a subestimar al “Campeón” de la diplomacia bolivariana, Nicolás Maduro. Y entre más lo atacan, más exponen ellos su congénita imbecilidad ante el mundo.
Nunca es tarde para reflexionar, hay un grupo de opositores que decidieron enrumbarse por el camino democrático, y están en la Asamblea Nacional, gobernaciones, alcaldías, disintiendo, pero buscando soluciones a la crisis económica, crisis que, insisto, causaron los mismos adversarios. Esto hay que recalcarlo.
Ahora, veo el caso de Alex Saab y me pregunto. ¿Por qué esa liberación causó tanta emoción en Venezuela? ¿Por qué ocasionó más revuelo que las primarias de la oposición, por ejemplo?
Esa pregunta puede tener muchas respuestas, sobre todo por parte de los analistas políticos, pero para mi, como un venezolano más, todo ese revuelo de satisfacción se debió sencillamente a que dejaban en libertad a un hombre que llevaba alimentos, medicinas y gasolina para el pueblo de Venezuela, bloqueado por los genocidas del imperio norteamericano.
En otras palabras, estaban sacando de la cárcel a un ser humano que fue injustamente preso por hacer el bien. Y si le haces bien al pueblo en Venezuela y en cualquier parte del mundo, el pueblo te corresponde. Y eso fue lo que vimos en mi país desde que se anunció la libertad de Alex Saab: una euforia general de justicia y agradecimiento.
Contrariamente, la oposición terrorista venezolana, desde que Chávez asumió el poder, ha querido acabar con la revolución provocándole daño a la gente. Después, cuando quieren ser presidentes o aspiran a cualquier otro cargo de elección popular, como les ocurre actualmente, tienen que pedirle el voto a todas esas personas que maltrataron.
Pero nuestros compatriotas conocen a los enemigos, saben que fueron ellos los que les pidieron bloqueo y medidas coercitivas y unilaterales a los gringos, los que ejecutaron las guarimbas que dejaron más de 130 muertos, los que han ejecutado los golpes de estado y han intentado matar al presidente Nicolás Maduro.
Por eso, fallan y seguirán fallando; salen con las tablas en la cabeza cuando se topan de frente con el pueblo, y pretenden en campaña convencerlo para que les den el voto. ¿Cómo darles el voto a quienes les han hecho tanto daño? He allí el fondo del asunto.
Cuánto desearía yo que lograran aprender algo de Alex Saab, porque Venezuela es un país para quererlo, hacerlo progresar, desarrollarlo, un país donde cabemos todos por encima de cualquier diferencia, de cualquier dificultad, no para destruir.
Para recibir en tu celular esta y otras informaciones, únete a nuestras redes sociales, síguenos en Instagram, Twitter y Facebook como @DiarioElPepazo
El Pepazo