Porque los Thunder lo tienen todo para soñar a lo grande. Sí, incluso con ganar el anillo. Tienen una rotación larguísima, una defensa de élite, han fichado en verano justo lo que necesitaban (un pívot como Isaiah Hartenstein, que aún no se ha estrenado por una lesión en la mano) y Alex Caruso… Y, sobre todo, disfrutan de un aspirante a MVP como Shai Gilgeous-Alexander y un escudero que apunta a jugador de época como Chet Holmgren.
Ellos fueron los mejores en el triunfo sobre los Hawks. El base hizo 35 puntos, 11 rebotes y nueve asistencias, quedándose a un pase de canasta del tercer triple-doble de su carrera. El pívot acabó con 25 puntos, nueve rebotes y seis tapones. Ha puesto ya 12 ‘gorros’ en lo que va de temporada. Con ellos dos, los Thunder llegarán lejos. Y con los secundarios que tienen detrás, hasta el fin del mundo.
Los de Oklahoma dejaron lo mejor para el final. Los Hawks marchaban por delante en el último periodo (91-92) cuando los locales hicieron un parcial de 13-0 con seis puntos de Shai. El 39-18 del cuarto definitivo fue demoledor, haciendo parecer sencillo un triunfo de lo más trabajado. Unos metieron 14/23 tiros de campo en el último cuarto y otros se quedaron en un pobre 6/20.
Los Thunder se emplearon duro en la defensa de Trae Young. Les sobran jugadores para ello (Caruso, Luguentz Dort…) y el base de los Hawks, que venía de promediar 34 puntos y 11 asistencias en los dos primeros encuentros, sufrió mucho desgaste. Bajó sus cifras a 24 y ocho, respectivamente, que no está mal, aunque su equipo acusó especialmente los 10 balones que perdió. En total, los de Atlanta extraviaron 19. Habían topado con un señor equipo.
Maxey da el primer triunfo a los Sixers
En ausencia de Joel Embiid y Paul George, los Sixers están en manos de Tyrese Maxey. Con 23 años, es el más joven del tridente de la franquicia de Filadelfia y está haciendo lo posible y lo imposible por mantener a flote al equipo. Fue decisivo para que su equipo consiguiera el primer triunfo de la temporada en la visita a los Pacers: 114-118 después de una prórroga.
Acabó con 45 puntos, el tope en lo que va de curso, tras meter 10 de los 13 de los Sixers en el tiempo extra. Antes ya había levantado a los suyos con 14 de los últimos 18 puntos del tercer cuarto.
Enfrente, un Tyrese Haliburton que sigue sin encontrarse cómodo. Metió 22 puntos, incluido un triple complicadísimo con el que forzó la prórroga, pero antes de esa acción había perdido dos balones clave. También falló dos tiros libres al final del tiempo extra que habrían empatado el marcador a 116.
Zion Williamson no pasa de la media hora
Los mejores por parte de los Blazers fueron Jerami Grant, que anotó 28 puntos, y Anfernee Simons, que hizo 27 puntos. Deandre Ayton se impuso en la pintura para hacer un doble-doble con 17+12.
El Pepazo/Marca