Al menos 50 migrantes resultaron intoxicados y 3.000 más fueron desalojados de los albergues Senda de vida 1 y 2, así como del Albergue Municipal Emergente en la ciudad fronteriza de Reynosa, Tamaulipas, debido a un incendio en un basurero clandestino, informaron las autoridades locales.
La Cruz Roja Mexicana dio a conocer que envió unidades médicas a la zona para atender a personas por intoxicación por monóxido de carbono debido al incendio, ocurrido en el ejido de Las Calabazas.
La Coordinación de Protección Civil y Bomberos de Reynosa informó que el fuego fue provocado por desconocidos en el basurero clandestino, el cual ya fue clausurado.
Sin embargo, las flamas provocaron una enorme nube de humo que penetró hasta las instalaciones de los albergues, donde los migrantes se alojan mientras esperan recibir las visas humanitarias que les permitan ingresar a Estados Unidos.
Ambulancias de Protección Civil y particulares participaron en el operativo coordinado por Protección Civil para atender a la población afectada, entre las que se encontraban mujeres embarazadas y niños. Nadie requirió hospitalización.
El 14 de diciembre, el presidente municipal de Reynosa, Carlos Víctor Peña, declaró que la entidad no cuenta con los recursos ni con un lugar que pueda servir de albergue para recibir a los migrantes.
«Por eso le pido a toda la gente que se encuentre en la frontera sur y que esté pensando en este momento venir a Reynosa, que no vengan. No vengan porque no van a poder ser recibidos. No que no queramos, pero ya los números son muy altos», declaró el edil.
A finales de diciembre pasado, la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos levantó una carpa gigante, más grande que un estadio de fútbol americano, en medio del desierto cerca de la ciudad fronteriza de El Paso, Texas, para acoger a los migrantes que esperaban pasar a ese país norteamericano tan pronto como expirara el Título 42.
Sin embargo, aunque estaba previsto que el 21 de diciembre esa legislación llegara a su fin, la Corte accedió al pedido de varios estados de evitar que se levantara, alegando que, de otra forma, se verían desbordados por los éxodos de migrantes que llegan a sus respectivas jurisdicciones.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) estima que, hasta noviembre de 2022, más de 2,2 millones de migrantes latinoamericanos han intentado cruzar ilegalmente la frontera entre México y Estados Unidos, en contraste con los 1,7 millones reportados durante el año fiscal 2021.
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El Pepazo/Sputnik