¿Siempre estuvo acompañada de la suerte?
La tragedia del naufragio del Titanic fue primicia en casi todos los periódicos de la época. El gran barco, catalogado por los millonarios de aquel entonces como indestructible, se hundió en las saladas y heladas aguas del océano Atlántico durante la noche del 14 y la madrugada del 15 de abril de 1912.
El barco inició su rumbo desde Southampton, Inglaterra e iba con destino a la ciudad de Nueva York, Estados Unidos. No obstante, el Titanic jamás tuvo la oportunidad de ver la Estatua de la Libertad tras chocar con un iceberg.
El naufragio dejó un saldo de 1.496 personas fallecidas de las 2.208 que iban a bordo. En ese momento no importó el estrato o la clase social a la que pertenecían los pasajeros que viajaban en el barco.
Aunque todos buscaron la manera de salvarse, fueron pocas las personas que lograron salir con vida de la tragedia que marcó el siglo XX. De hecho, el cine recreó la historia con la famosa película ‘Titanic’, protagonizada por Leonardo Di Caprio y Kate Winslate.
Hubo quienes contaron con la suerte de volver a ver la luz del día, de observar otro amanecer; lograron ser rescatados en medio de la tenebrosa oscuridad, el frío penetrante y las congeladas aguas del Atlántico.
Este fue el caso de Violeta Jessop, una argentina que se salvó de este suceso y de dos más, como el del Britannic y el Olympic. ¿Siempre estuvo acompañada de la suerte?
Según la ‘BBC’, comenzado el siglo XX, Jessop se encontraba viajando en el barco británico RMS Olympic, el cual se estrelló con un buque de guerra frente a las costas británicas en 1911, y aunque no hay mayor detalle de este acontecimiento, la latina logró salvarse y contar con otra oportunidad en su vida.
Increíblemente, la mujer argentina sobrevivió al desastre que sepultó más de mil víctimas en 1912, de acuerdo con el informe proporcionado por el citado medio.
Con tan solo 24 años de edad, pasó de la fantasía de viajar en una de las promesas tecnológicas a cerrar los ojos mientras esperaba que la muerte llegara por ella en aquella madrugada.
Sin embargo, no fue así, Jessop fue salvada por otro golpe de suerte que evitó que sus sueños quedaran hundidos junto al Titanic. Y aunque otras personas en su lugar hubieran preferido no volver a viajar en barco nunca jamás, ella decidió arriesgarse de nuevo.
Según reportes históricos, esta embarcación funcionó como un transatlántico reconvertido en buque hospital, el cual fue atacado por los alemanes cuando estaba por el mar Egeo y solo bastó una hora para que la embarcación naufragara. Pero, la latina volvió a desafiar la muerte en esta embarcación que, por poco, le arrebata la vida.
Fueron tres momentos en los que las saladas aguas azules no se la llevaron al infinito de sus profundidades.
Llegó la muerte para llevarse a su gran desafiante
‘Miss Inhundible’, así fue llamada la latina que sobrevivió a tres tragedias que por poco le quitan la vida.
Sin embargo, como a todos nos llega la muerte, y aunque esta señora fue una experta en evitarla, en el año 1971, cuando ya contaba con la edad de 84 años, no pudo ganarle la batalla a una insuficiencia cardíaca.
“Las otras camareras y yo miramos cómo las mujeres se aferraban a sus maridos antes de que las metieran en los botes salvavidas con sus hijos. Un oficial nos ordenó abordar al bote número 16 para demostrarles a las mujeres que era seguro”, escribió ‘Miss Inhundible’ en un fragmento del diario ‘Titanic Survivor’.
El Pepazo/El Tiempo Colombia