Los primeros partidos de la primera ronda de los Playoffs ejemplifica la igualdad, competitividad de la post-temporada y la ausencia de un clarísimo favorito al título

EUGENIO MUÑOZ FERNÁNDEZ

Dicen, y parece cierto a simple vista, que los Playoffs de la NBA cambian a todo el mundo. Son igualados, locos, se defiende y es un baloncesto de más calidad. Los favoritos a campeón lo siguen siendo, pero la primera ronda de los de 2023 manifiesta que para vencer hay que luchar. Sólo un 4-0, el de los Philadelphia 76ers a los Brooklyn Nets. Y los grandes nombres que se presentaban ‘en la línea de salida’ todavía tienen que luchar para garantizar su billete a las semifinales de conferencia. No hay grandes alardes.

Existen favoritos que ‘bajan su cotización’. Le ocurre a los Milwaukee Bucks, que tendrán que ponerse el mono de trabajo ante unos épicos Miami Heat. La serie de Jimmy Butler es sensacional (más de 25 puntos en cada uno de los tres partidos disputados), se suma la ausencia de Giannis Antetokounmpo y un cambio de ritmo en los Bucks que sólo apareció en el segundo choque.

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También le ocurre al gran nombre, a los Golden State Warriors. En su defensa, parece evidente, está que la gran serie de primera ronda la juegan ante los Sacramento Kings. Todos los partidos son igualados, el choque entre Stephen Curry y De’Aaron Fox es épico, Draymond Green resurgió en un magnífico choque en defensa en el cuarto… Es baloncesto de altísimo nivel. Pero esos Warriors dominantes de antes ya no existen. Incluso hacen cambios, como Green saltando desde el banquillo. «Ganamos. Soy un fiel creyente que si algo no está roto, no tienes que cambiarlo. No llegaré al punto de enfadarme o molestarme por algo. Quiero que pase lo mejor para el equipo», relató.

No me enfadaré por ser suplente
Draymond Green

Otros favoritos se mantienen. Les ocurre a los Boston Celtics, que salvo en el épico partido de Trae Young para el 2-1, mandan con paso firme ante los Hawks. Jayson Tatum y Jaylen Brown se fueron hasta los 62 combinados en el tercer triunfo, y el ‘7’ fue la respuesta cuando a Boston se le apagó la luz de la imaginación. Vencen y siguen convenciendo. En esa línea también están los Denver Nuggets, a los que sólo las genialidades de Anthony Edwards evitan un paseo de primera ronda ante los Timberwolves.

¿Y hay favoritos que suben?

En esa suma de sensaciones y subes y baja, también hay otros equipos que eran favoritos y que suben su cotización en la post-temporada. Como Los Ángeles Lakers, que si bien no están en la primera fila de favoritos demuestran tener al factor más diferencial. Anthony Davis machaca tableros allá dónde va y su dominio de la anotación más rebote es impecable. Los Memphis Grizzlies, equipo enérgico pero sufridor ante los Lakers, no encuentran una lectura para frenarle. Con energía y acierto se llevaron el ‘Game 2’, pero si todo se iguala… El oro y púrpura manda.

Y existe la duda con los Phoenix Suns. Numéricamente, no puede marchar mejor su serie. Partidos igualados, sólo una derrota tras una genialidad defensiva de Russell Westbrook y sus estrellas castigando. Hasta ahí, todo es cierto. Pero parece que también se está demostrando cómo hacerles daño. Enfocado en malos inicios de partido, demasiada carga de minutos a los titulares y recibiendo mucho de jugadores no estelares. Eso sí, ganan. Y mucho. Con lo que… evidencian que quizá el camino no es el de arrasar.