Manuel Paredes
El mundo se encuentra en una profunda crisis de confrontación que desborda el respeto por la vida humana. Muchas veces se tiene una doble rasero para atender los problemas de la justicia y la paz.
Y es que cuando está de por medio el reparto del mundo ya repartido, se apela al viejo dicha en la guerra todo se vale. De allí la proliferación de la mentira como primera victima en una confrontación belica. La otra es la manipulación mediatica de los medios que tendenciosamente acuden a los bulos para esconder la realidad.
La primera verdad que se esconde es que las Naciones Unidas aprobaron mediante la resolución 181 de 29 de noviembre de 1947, el derecho de los árabes palestinos a un Estado al igual que Israel, acuerdo firmado por las
delegaciones de ambas naciones. Lo que conllevó al desplazamiento de los habitantes palestinos de los territorios en donde se asentarían los israelitas provenientes de diversas partes del mundo para establecer el Estado de Israel.
El segundo aspecto es las Naciones Unidas en consideración a esos desplazamientos forzados de palestinos aprobó la resolución 194, y por tanto el derecho al retorno de los refugiados o a obtener una compensación. Aspecto que posteriormente se ha negado Israel a que haga realidad.
Por lo tanto, no es posible ver a los palestinos como invasores de un territorio sino desplazados del mismo territorio que ellos venían ocupando antes de 1948, creación del Estado de Israel. Entonces quien es el invasor?
Otro aspecto es el sometimiento de los espacios que son de Palestina como lo son Gaza y Cisjordania como cárceles a campo abierto, donde sus fronteras están custodiadas por el Estado de Israel, negándole la salida de sus habitantes, negándole el derecho al mar para salir a pescar, el conseguir trabajo en Israel y no permitir la entrada de alimento y medicinas al interior de esta nación árabe. Todo un apartheid y segregación racial.
Igualmente, Israel ha venido ampliando sus territorios mediante la confrontación bélica, en un principio Israel le fue asignado un 49% de ese territorio y gracias a la guerra de 1967 y la de 1973 ocupa el 80% del mismo, incluso mudando su capital de Tel-Aviv a Jerusalén, lugar que las Naciones Unidas tomaron como espacio internacional por reunir varias religiones oficiales como el judaísmo, católica y musulmana.
En medio de esta crisis humanitaria y de ocupación territorial israelí, la ONU emitió la resolución 242, Adoptada por unanimidad en el Consejo de Seguridad el 22 de noviembre de 1967, seis meses después de la guerra de los seis días, la resolución “exige la instauración de una paz justa y perdurable en Oriente Medio”, que pasa por “la retirada del ejército israelí de territorios ocupados durante el conflicto” y el “respeto y reconocimiento de la soberanía y la integridad territorial y la independencia política de cada Estado de la región, y su derecho a vivir en paz en el interior de fronteras reconocidas y seguras, al abrigo de amenazas y actos de fuerza”.
Estas resoluciones no han sido cumplidas por el apoyo que Estados Unidos ha dado a la concepción sionista de aumentar su ocupación no solo de Palestina, sino de Líbano, Siria y Egipto, mediante la toma en 1973 de los Altos del Golán, que ha ocasionado todo la confrontación en condiciones disimiles, puesto que Palestina carece de un ejército formal y no fue sino hasta hace poco cuando Naciones Unidas admitió a Palestina como país integrante de la ONU.
Es importante destacar que Estados Unidos al igual que China, Rusia, Francia y Reino Unido tiene el derecho al veto ante cualquier resolución que intervengan en sus derechos imperialistas, tal como ha hecho al bloquear
numerosas resoluciones para devolver territorios ocupados a los palestinos y negar el ingreso de Palestina a la ONU.
No fue sino hasta el 29 de noviembre de 2012 cuando la Asamblea General de la ONU aprobó una resolución que cambiaba el estatus de Palestina de “entidad” a “estado observador no-miembro” tras una votación de 138 votos a favor y 9 en contra, con 41 abstenciones.
De manera que hasta hoy día las Naciones Unidas a pesar de la resolución 181 de 1947 no han establecido un Estado de Palestina, Una serie de países entre los que se incluye Israel no reconocen a Palestina, adoptando como postura la idea de que dicho estado solo puede ser establecido mediante negociaciones directas entre Israel y la Autoridad Nacional Palestina.
Los principales obstáculos para un acuerdo definitivo son la delimitación de fronteras definitivas, la seguridad de ambos estados, el acceso al agua, el estatus de Jerusalén junto con el libre acceso a los lugares sagrados, la
expansión de los asentamientos israelíes en Cisjordania y Jerusalén Este y el derecho de retorno de los refugiados palestinos que fueron expulsados o huyeron de sus hogares durante la guerra árabe-israelí de 1948.
Frente a este cuadro es importante organizar la solidaridad con Palestina, lo cual no implica el apoyo a Hamas, pero tampoco negar el derecho de Palestina a su derecho a su autodeterminación, en tal sentido estamos convocando a una actividad a favor de la creación de un Estado Palestina, que se estabezca un acuerdo de respeto a sus territorios y de los derechos humanos de sus habitantes.
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