El japonés de los Dodgers ha elegido el privilegio de una vida serena y tranquila
El fenómeno del beisbol, Shohei Ohtani, continúa demostrando su buen ojo tanto dentro como fuera del terreno de juego. El bateador estrella de los Dodgers ha ampliado su cartera inmobiliaria con la adquisición de una lujosa mansión en La Cañada Flintridge, valorada en 7,8 millones de dólares.
La mansión en sí es una obra de arte arquitectónica que fusiona a la perfección elementos modernos de mediados de siglo con detalles contemporáneos. Sus amplios ventanales y claraboyas de suelo a techo inundan los espacios de luz natural, creando una atmósfera cálida y acogedora. La entrada, revestida con elegantes paredes de Bluestone, ofrece una primera impresión de sofisticación y buen gusto.
El diseño interior, aunque no se ha revelado en detalle, seguramente refleja la personalidad de Ohtani: minimalista, funcional y con un toque de elegancia. No cabe duda de que esta casa será un oasis para el jugador japonés, donde podrá relajarse y recargar energías después de cada juego.
La compañía de otros famosos en el vecindario, como Donald Glover, Topher Grace y Angela Bassett, añade un toque de glamour a la zona. Sin embargo, es evidente que Ohtani buscaba más que un simple estatus; deseaba un hogar donde pudiera disfrutar de privacidad y tranquilidad.
El Pepazo/Meridiano