“El Cañón del Merengue”, ese ícono de la música que se ganó el cariño del mundo con su humildad y sencillez, partió y se despidió como era su estílo: en medio de aplausos y de la admiración de todos…
Para muchos, Rubby Pérez no se ha ido y agregan que ya es una leyenda de la música y ahora es que comienza su gran legado..
Fue uno de los más de 220 fallecidos tras el desplome, la madrugada del martes, del techo de la discoteca Jet Set, en Santo Domingo, cuando se presentaba en vivo ante cientos de fanáticos.
Su funeral, acompañado por globos y canciones como "Volveré", en el Teatro Nacional, lugar en donde se realizó el homenaje póstumo abierto al público, es el más grande homenaje que se ha brindado a una figura dominicana en toda la historia.
Sus hijos, hermanos y amigos lo lloran desde que se conoció su muerte y no cesan de rendirle tributo a quien fue y seguirá siendo “La Voz más Alta del Merengue”…
No hay palabras para describir el dolor en ese ambiente. Se vio llorar al presidente Luis Abinader y cuando un presidente llora, imagínense cómo estará el país…
Monstruos de la música como Wilfrido Vargas, Fernando Villalona y Juan Luis Guerra se hicieron presentes bañados en lágrimas. Wilfrido expresó sus mejores palabras a quien considero su hijo y Juan Luis estaba devastado y muy compungido por la partida de quien fue un gran amigo a quien admiró y respetó…Lo definió “como un artista admirable” y “la voz más hermosa del merengue”
Y el dolor llegó al paroxismo cuando su hija, Zulynka ,cantó la canción “Volveré”, la que tanto gustaba a su padre…
El féretro partió a su última morada con dos banderas encima: la de República Dominicana, su patria de nacimiento, y la de Venezuela, a la que consideraba su otra patria…
Así se despidió “El Cañón del Merengue” en medio del llanto y de canciones que nunca faltarán por siempre…
Para recibir en tu celular esta y otras informaciones, únete a nuestras redes sociales, síguenos en Instagram, Twitter y Facebook como @DiarioElPepazo
El Pepazo/Con información de T47Nueva York