Los números de Castro hablan por sí sólo de su incesante ofensiva de .306/.359/.472 luego de 13 encuentros, con tres dobles, un cuadrangular, siete carreras empujadas, cuatro anotadas, una base robada, y .831 de OPS. El criollo lleva seis juegos seguidos dando al menos un sencillo.
El venezolano Harold Castro anda en llamas y su bate así lo corrobora, pues este domingo fue la bujía de su equipo Reales de Kansas City al que apoyó para extender su número de victorias a 15 y ser el que más ganancias tiene esta pretemporada en la Liga Cáctus. Kansas derrotó a Colorado 10 carreras por 2.
Castro también alcanzó un hito personal: extendió a seis los juegos dando al menos un imparable, lo que habla muy de sus condiciones y que lo acercan a ganarse el ansiado cupo en el equipo grande, de cara a la temporada próxima a iniciarse.
Ocurrió en el Salt River Fields at Talking Stick. Allí, donde Castro cosechó una jornada productiva al batear de 2-1, doblete con par de remolcadas, igual número de anotadas, le dieron un dead ball, recibió un boleto y se estafó una almohadilla.
Para Castro no hay imposibles y le pone de su mejor esfuerzo, tanto así que recogee sus frutos y volvió apisar fuerte en su misión de conseguir un puesto dentro del equipo.
En lo que va de entrenamientos primaverales, ha actuado de manera polivalente: igual ha defendido tanto la inicial, como la intermedia y la antesala, demostrando así que su versatilidad podría ser clave.
El caraqueño inició el segundo inning tras recibir un pelotazo, algo que le permitió minutos más tarde anotar la primera rayita del compromiso con un sencillo de Tyler Tolbert. De hecho, dicha entrada fue bastante productiva para los Reales, quienes concretaron hasta ocho carreras para tomar una cómoda ventaja.
Volvió al cajón en ese capítulo, esta vez con hombres en las esquinas, y tras conectar un lanzamiento alto bateó un elevado hacia el jardín izquierdo, el cual sirvió para remolcar dos más y llegar a salvo a la segunda base. Acto seguido, aplicó su excelente velocidad para anotar tras un sencillo de Cavan Biggio.
Y los números de Castro hablan por sí sólo de su incesante ofensiva de .306/.359/.472 luego de 13 encuentros, con tres dobles, un cuadrangular, siete carreras empujadas, cuatro anotadas, una base robada, y .831 de OPS.
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El Pepazo/Con información de Meridiano
Ocurrió el 17 de marzo de 1971, en el recién bautizado estadio "Luis Aparicio 'El Grande' de Maracaibo, donde aquella noche jugaron un partido de pretemporada del mejor béisbol mundo, los célebres equipos Yankees de Nueva York y Medias Blancas de Chicago.
Trabajó por espacio de cuatro innings en los que solo permitió cuatro hits y una carrera (un jonrón), mientras que ponchó a seis contrarios y no otorgó bases por bolas para preservar la victoria de los Filis 12 carreras por 1 sobre los Orioles de Baltimore en lo que fue su primera victoria de pretemporada.
Santander se fue, en el partido de este domingo, de 4-2 con una impulsada, mientras que Giménez ligó de 3-1, un cuadrangular, anotó e impulsó. Fue el primer jonrón de Giménez de pretemporada y el primero con su nuevo equipo.
