El beta de Apascacio
Gracias a su inquebrantable propósito de cumplir y hacer cumplir las leyes, el 17 de marzo de 1980 detuvo la caravana presidencial de Luis Herrera Campins, cuando el jefe de Seguridad trató de “comerse una flecha”, so pretexto de que llevaba prisa porque era un asunto de Estado. “Con más razón deben cumplir ustedes las leyes. Por aquí no van a pasar”, dijo Apascacio. Y no pasaron.