Ember Garrido
Como el canto de un turpial, al escuchar esas palabras con su voz, sus sentidos detuvieron su reacción.
Y se apodero de sus pensamientos una belleza que marco el inicio de esta historia con valentía y decisión.
Lagrimas en su rostro con sus besos seco, le dijo tengo amor sincero, pero la desconfianza llego de nuevo.
Dudas y temor siente al tocarle un verdadero amor, porque al corazón lo pueden asesinar sin compasión.
Pero no todo en este cuento de vida es tristeza y melancolía, pues el caballero con sonrisa de amor.
Día tras día el volvía, para curar las heridas causadas por centellas que llegaron para marcar su vida .
Y que jamás le dejaron una caricia, solo dolor y fatiga, pero el con manos cariñosas fue cubriendo su piel
De ternura y compresión, fue llenando su sonrisa la cual brillo en el infinito camino del destino también
Ella volvió a entonar con su voz angelical esas palabras, ahora cargadas de frescura y felicidad
En su tono de ternura el sintió volver al cielo, al vientre de la madre , al soplar del viento .
Y así los dos al fin supieron que amar se puede, cuando con atención se escucha la voz del corazón…
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El Pepazo
