¿A quién no le ha pasado alguna vez que se le quedan las manos dormidas o con hormigueo? Sentir esto es algo muy frecuente que puede no tener mayor importancia o tal vez sí que haya que preocuparse. Todo depende de qué síntomas aparezcan además de este, como señalan los dos neurólogos consultados por CuídatePlus. Ambos expertos detallan por qué causas puede pasarnos este entumecimiento y, además, qué tratamientos proceden en cada caso.
Los doctores explican que el adormecimiento de manos es muy posible que suceda por las noches, y esto se debe a que adoptamos malas posturas sin darnos cuenta en las que se comprimen los brazos o las manos. Lo más habitual es que, una vez que se cambia de posición, esta molestia desaparezca rápidamente. Es decir, que surge como consecuencia de permanecer en la misma postura durante bastante tiempo. “Si ocurre con mucha frecuencia o también lo percibimos durante el día conviene consultarlo con un médico porque puede ser síntoma de alguna enfermedad subyacente”, apunta Pedro Martínez-Ulloa, médico adjunto del Servicio de Neurología, responsable de la Unidad Neuromuscular del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz.
Existen muchos motivos por los que las manos se duermen, “sobre todo se debe a trastornos del sistema nervioso periférico y, mucho menos frecuentes, a problemas del sistema nervioso central, entre otras causas”, especifica Martínez-Ulloa, quien detalla cuáles son exactamente:
Trastornos del sistema nervioso periférico (SNP)
Síndrome del túnel carpiano o neuropatía compresiva del nervio mediano en muñeca
Esta es una de las causas más frecuentes de hormigueo persistente en manos. Martínez-Ulloa explica que se debe a la compresión del nervio mediano dentro un espacio de la muñeca conocido como túnel carpiano. “Representa la neuropatía focal compresiva más frecuente que se observa en la práctica clínica con una prevalencia estimada en la población general de aproximadamente entre un 1-5 %”.
El neurólogo José Manuel Moltó, miembro de la Sociedad Española de Neurología (SEN) señala que este trastorno es muy habitual por motivos laborales, personas que usan mucho las manos en su trabajo, por ejemplo, el teclado o que manipulan cosas. “Esto predispone a que se produzca esa sensación desagradable de parestesias en la mano, además son las que típicamente te despiertan en la madrugada”.
Además de bastante habitual en personas que realizan trabajo repetitivo con las manos, también se ve con frecuencia durante el embarazo resolviéndose con frecuencia de forma completa tras el parto. Los síntomas de hormigueo predominan en los primeros tres dedos de la mano si bien «existe gran variabilidad pudiendo extenderse hacia el resto de la mano o en sentido proximal hacia el antebrazo», describe Martínez-UIloa. Moltó recalca que, además de esa sensación de hormigueo, este trastorno puede llegar a producir un dolor importante.
El neurólogo Martínez Ulloa señala que el entumecimiento de manos puede sentirse inicialmente de forma intermitente por la noche, “al ser más frecuente la compresión nerviosa con algunas posturas mantenidas al dormir, y cuando son intensos pueden llegar a despertar a los pacientes del sueño”. Y añade que, a medida que progresan los síntomas, también pueden percibirse durante el día, especialmente durante actividades que requieren posturas mantenidas o movimientos repetidos con las manos.
El tratamiento de este trastorno depende del grado de afectación. En los casos más leves suele ser suficiente con medidas de higiene postural y utilización de dispositivos que eviten movimientos forzados de flexión/extensión de muñeca como férulas nocturnas. “En casos de afectación grave o ausencia de respuesta a un tratamiento conservador, se podría plantear tratamiento quirúrgico para descomprimir el nervio”, indica Martínez-Ulloa.
Según explica Moltó, para tratar esta dolencia no se prescriben medicamentos, ya que, en general, todo lo que se refiere al nervio periférico hay muy pocos fármacos. Sobre la intervención, este especialista comenta que “es una operación muy sencilla realizada por el traumatólogo que libera un poco el ligamento de la muñeca y así ya no se comprime”.
Neuropatía compresiva del nervio cubital
Se trata de otra neuropatía compresiva frecuente en miembros superiores. Solo que en este caso habitualmente el sitio de compresión es el codo. Los síntomas se sienten sobre todo en el borde interno de la mano, y en el cuarto y quinto dedo de la mano. El tratamiento es similar al síndrome del túnel carpiano con medidas de higiene postural, férulas de codo y en ocasiones cirugía.
Moltó puntualiza que esta afectación en algunas zonas se conoce popularmente como «dolor, golpe o codazo de suegra» y suele aparecer por un golpe a nivel del codo, con lo que el nervio queda atrapado y produce sensación de hormigueo en las manos. “Cuando alcanza un nivel de gravedad que molesta mucho, el traumatólogo opera para cambiar el nervio de posición y no quede tirante, sobre todo cuando el codo se flexiona al máximo”.
Radiculopatía cervical
En este caso, se trata de una lesión de una raíz nerviosa (las estructuras que salen de la médula y posteriormente se dividen para formar los nervios periféricos). “Con frecuencia la causa es una hernia discal que la comprime. En función de la raíz afectada notaremos el hormigueo en zonas diferentes”, precisa Martínez-Ulloa.
Otra causa de que se comprima una raíz nerviosa es sufrir artrosis, añade Moltó, quien especifica que este dolor no tiene por qué ser permanente, a veces puede suceder una temporada nada más. Este especialista señala también que la parestesia puede aparecer de noche cuando se fuerza el cuello sin que la persona se dé cuenta, por ejemplo, cuando la almohada no es la más conveniente.
Moltó indica que la cirugía de columna no es lo habitual para tratar este problema, porque resulta muy agresiva y la decisión de si llevarla a cabo o no dependerá de muchos factores y de forma individualizada en cada caso.
Plexopatía braquial
El neurólogo de la Fundación Jiménez Díaz explica que el hormigueo en la mano aparece por traumatismos o procesos inflamatorios en el plexo braquial, que es la red de nervios que se encarga de enviar señales nerviosas desde la médula espinal hasta el hombro, el brazo y la mano. “Cuando se afecta puede originar hormigueo en la mano si bien con frecuencia existirán otros síntomas acompañantes”.
Polineuropatía periférica
“Es un término que se utiliza para hacer referencia a la existencia de daño en muchos nervios periféricos de forma simultánea y suele afectar de forma predominante a los segmentos más distales. Una de las causas más frecuentes en nuestro medio es la diabetes mellitus o consumo excesivo de tóxicos como el alcohol. Puede aparecer hormigueo en las manos si bien suelen comenzar antes los síntomas en los pies”, refiere Martínez-Ulloa.
Trastornos del sistema nervioso central (SNC)
Aunque con mucha menos frecuencia, algunas enfermedades del SNC con afectación del cerebro o de la médula espinal cervical pueden originar hormigueo en manos, si bien habitualmente viene acompañado de otros síntomas.
Enfermedades vasculares cerebrales o ictus
Los ictus son trastornos de la circulación cerebral que están causados por obstrucción o rotura de un vaso, lo que va a generar un daño sobre una región del cerebro. Se caracterizan por un inicio brusco y habitualmente afectan a un lado del cuerpo. Martínez-Ulloa subraya que puede ser una causa de hormigueo en manos, aunque a la vez suele afectar también a la cara o la pierna de un mismo lado, además de otros síntomas.
Enfermedades inflamatorias con afectación de cerebro y/o médula espinal cervical
Por ejemplo, esclerosis múltiple o enfermedades autoinmunes sistémicas con afectación del sistema nervioso, como lupus eritematoso, señalan el neurólogo de Fundación Jiménez Díaz.
Otros trastornos neurológicos
Migraña con aura
En ocasiones, el dolor de cabeza puede ir precedido de síntomas neurológicos transitorios que incluyen síntomas visuales como destellos luminosos, dificultades para hablar u hormigueo en cara o manos. El tratamiento de la migraña incluye fármacos analgésicos para controlar el dolor y en ocasiones cuando los dolores son muy frecuentes se puede valorar algún tratamiento preventivo.
El doctor Moltó subraya que en este caso la parestesia es mucho menos frecuente que la visión distorsionada de alguna manera, pero puede pasar, y suele ser en personas jóvenes que sienten por primera vez este tipo de migraña.
Otros trastornos
- Crisis de ansiedad (en este caso se duermen las dos manos y sucede cuando se está hiperventilando, describe Moltó).
- Alteraciones metabólicas como por ejemplo desequilibrios iónicos, alteraciones endocrinas o carenciales.
- Efectos secundarios de algunos fármacos.
- Problemas circulatorios como arteriopatía periférica. Fenómeno de Raynaud.
- Fibromialgia. Síndrome de dolor miofascial.
¿Cuándo es preocupante y se debe ir al médico?
Ambos neurólogos comentan que cuando el hormigueo de manos ocurre con frecuencia o se acompaña de otros síntomas, por ejemplo pérdida de sensibilidad, debilidad o torpeza con las manos debemos consultar con un médico para investigar la causa y valorar algún tratamiento. “La historia clínica y el examen físico son claves para determinar el origen de los síntomas sensitivos. Las pruebas complementarias como analítica de sangre y estudios de conducción nerviosa nos pueden ayudar en determinadas circunstancias”, enfatiza Martínez-Ulloa.
Consejos para evitar el entumecimiento de manos
La principal causa de que aparezca hormigueo en las manos son movimientos repetidos y posturas inadecuadas con las manos que generan presión sobre los nervios periféricos y con el tiempo se pueden dañar lo que va generar síntomas cada vez más frecuentes. El doctor Martínez-Ulloa da algunos consejos para prevenir esta molestia:
- Evitar malas posturas durante el sueño como dormir con los brazos debajo de la almohada o con las muñecas dobladas.
- Evitar posturas de flexión o extensión mantenida con la muñeca durante el día como cuando estamos sujetando el teléfono móvil o al trabajar con el ordenador intentar mantener el teclado a la altura de la muñeca para evitar la flexión constante y utilizar almohadillas para el ratón.
- Adoptar una postura adecuada en el trabajo manteniendo los hombros relajados y la espalda en posición recta para evitar contracturas musculares que puedan ser causa de dolor y también de hormigueo.
- Realizar ejercicios de estiramiento con frecuencia y hacer descansos entre las tareas para relajar los músculos y disminuir la presión sobre los nervios.
- Evitar factores de riesgo que pueden predisponer a que los nervios se compriman con mayor facilidad como la obesidad, diabetes, hipotiroidismo y desnutrición.
Para recibir en tu celular esta y otras informaciones, únete a nuestras redes sociales, síguenos en Instagram, Twitter y Facebook como @DiarioElPepazo
El Pepazo/Cuídate/Marca