Samuel Clemente
El nombre de Anggy Díaz, la joven de 21 años que murió decapitada el 11 de enero, se suma a la lista de víctimas de violencia doméstica en Estados Unidos.
La vida de Díaz terminó en el condado Waller, al noreste de Houston, Texas, en la casa que ocupaba con su esposo Jared Dicus, también de 21 años.
Hombre con quien se había casado en octubre pasado y es así el principal sospechoso del homicidio.
El hombre les dijo a las autoridades que mató a Díaz, en circunstancias que están bajo investigación, según reportó la cadena CNN
De acuerdo con información proporcionada por el sheriff del condado Waller, Troy Guidry, el 11 de enero las autoridades recibieron una llamada alertando sobre una posible muerte en una vivienda en la ciudad de Magnolia.
Al llegar al lugar, los agentes encontraron una escena escalofriante:
La cabeza de Anggy Díaz estaba en la parte posterior de la casa y el cuerpo en el interior de la vivienda, según el sheriff.
El área estaba cubierta de sangre en «una escena espantosa», dijo Guidry, quien agregó que anteriormente se habían recibido llamadas desde el mismo lugar reportando disturbios.
Algo no está bien
Dicus y Díaz vivían en la propiedad de los padres del sospechoso, en una pequeña casa contigua a la casa principal…
Y fueron precisamente los padres de Dicus quienes sintieron que algo no estaba bien, se acercaron a la vivienda de la joven pareja y, al darse de lo sucedido, dieron cuenta de lo sucedido llamaron a la policía.
Según Troy Guidry, Dicus se encontraba en la casa y confesó a las autoridades que le quitó la vida a su esposa.
El sospechoso fue detenido sin ofrecer resistencia y su familia se sometió a los interrogatorios como parte de las investigaciones.
Las autoridades informaron que Dicus usó un cuchillo de cocina para matar a Díaz; el arma está en poder de las autoridades.
el sheriff del condado Waller informó que la fianza de Dicus subió de 500.000 dólares, 1 millón de dolares.
El fiscal del distrito Sean Whittmore dijo que la garantía inicial no era lo suficientemente alta por la naturaleza de la muerte de la joven.
También recordó el comportamiento violento del sospechoso durante un arresto en noviembre por conducir en estado de ebriedad.
Esto ocurrió dos meses antes de la muerte de su esposa.
Whittmore dijo que en ese arresto, Dicus exhibió cambios de humor y comportamiento violento, incluyendo golpear ventanas…
Esto, hasta que finalmente lo colocaron en una silla de inmovilización.
En aquella ocasión el sospechoso fue liberado con una fianza de 1.000 dólares.
La fiscalía del condado Waller ya presentó cargos por asesinato contra Dicus…
Quien permanece en prisión en espera de que se determine una fecha para que inicie su juicio.
Angelica Fitzgerald, empleada de la oficina del abogado penalista Travis Fleetwood, que representa al sospechoso:
Dijo que la defensa de Dicus no tenía comentarios en este momento.
Un video de vigilancia captado el mismo día de la muerte de Díaz aparentemente muestra a Dicus saliendo del supermercado en donde trabajaba la mujer.
El sospechoso saca una bebida, sale del local sin pagar, toma un sorbo y sube a su vehículo y se va, según la policía…
Que sostiene que no está claro si esto sucedió antes o después de que su esposa fuera decapitada, pero sí ese mismo día.
Sorpresa, hay boda
Díaz llegó a Estados Unidos desde Nicaragua a los 18 años y trabajaba en un supermercado en donde conoció a Dicus.
Meses después, la pareja sorprendió a sus familiares y amigos al casarse de manera privada en octubre pasado, dijo Irvin Orellana, un tío de la occisa.
El juez que los casó, Trey Duhon, expresó en sus redes sociales que se sentía triste por la noticia.
El jurista dijo que en el corto tiempo que convivió con la pareja fueron muy agradables.
Según reportó el propio sheriff Guidry, Anggy Díaz era una mujer indocumentada.
En el servicio funerario de la víctima, sus familiares la recordaron como una joven trabajadora, optimista, que llegó en busca del sueño americano:
Le gustaba la comida china, el color rosa y su árbol favorito era el cerezo japonés. Trabajaba para ayudar a su madre de crianza en Nicaragua, se destacó entre sus principales gustos y propósitos.
Su madre biológica y sus familiares quienes residen en Houston, han quedado devastados con la perdida de Díaz.
Una joven muy activa en sus redes sociales en donde se mostraba alegre con mensajes positivos y de superación personal.
Aunque según sus compañeros de trabajo a veces la veían triste y preocupada pero nunca se quejó de que tuviera problemas con su esposo.
Sus familiares lanzaron una campaña en la plataforma GoFundMe el 12 de enero y recibieron poco más de 37.000 dolares para llevar acabo el funeral de Anggy Díaz en su natal Nicaragua.
Los restos de la joven fueron recibidos por sus familiares y amigos que había dejado con muchas ilusiones en el país centroamericano, sin imaginar el triste final que le esperaba.
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El Pepazo/2001/Con información de la cadena de noticias CNN en español
